Hay pocas marcas que hayan fabricado un potente y espectacular motor W12. Durante años ha sido la enseña y la marca de fábrica de muchos modelos de alta gama, pero parece que su ciclo vital ha terminado. Las restricciones a las emisiones contaminantes ponen punto y final a este impresonante bloque. Ahora le toca el turno a Bentley poner fin a su producción.
Será el año 2024 cuando salga de su fábrica el último de estos motores. Hasta ese momento, habrán sido unos 10.000 motores de este tipo los que se han fabricado en la Dream Factory que la compañía tiene en Crewe, Inglaterra. El motivo es el avance de Bentley hacia los objetivos fijados en su programa Beyond100.
Este pretende que todos sus modelos estén electrificados a partir de los primeros años de la próxima década, así que hay prisa en la marca para ir sustituyendo los motores disponibles. El motor W12 nació en 2003 para ser montado en un Bentley Continental GT y tras 21 años en el mercado, será sustituido por otras opciones, todas ellas híbridas.
En la actualidad ya hay dos modelos híbridos en Bentley. Son el Bentayga y el Flying Spur Hybrid, dos modelos que están obteniendo un considerable éxito en el mercado.
Una despedida con estilo
El motor W12 no se irá de cualquier manera. Se está preparando a conciencia, con una última versión de este motor que se ha convertido en la más potente de todas las que se han creado hasta el momento. Esta se utilizará en un Bentley Batur, un modelo fabricado de forma manual por Mulliner.
Este último W12 de Bentley ofrecerá una potencia de 750 CV y un par máximo de 1.000 Nm, obtenidos en el intervalo entre 1.750 a 5.000 rpm. Aunque está es, como hemos dicho, la última versión, todavía quedará una pequeña cantidad del motor en su versión de 659 CV, montados sobre varios modelos de la marca.
Los compradores de las versiones Speed del Bentley Continental GT, el Bentayga y el Flying Spur, además del Continental GT Mulliner Flying Spur Mulliner contarán con las últimas unidades de este modelo en su versión anterior. Los que quieran disfrutar de este motor en sus coches van a tener que moverse rápido, porque una vez se vendan todos los coches que lo equipen, ya no estará disponible nunca más.
La fábrica de Crewe pasará a fabricar los bloques para los sistemas de tracción híbridos. Eso sí, los 30 especialistas que trabajan en los motores W12 serán formados para acometer esta nueva forma de trabajar y serán parte del equipo de producción.
Un repaso a la historia del motor W12 de Bentley
Este motor nació en 2003 y a lo largo de estas dos décadas se ha mejorado su rendimiento en términos de potencia, par, emisiones y refinamiento. Desde ese año, la potencia ha crecido un 37% y el par motor un 54%. Las emisiones han ido en sentido contrario, ya que se han reducido en un 25%.
En el año 2015 se lanzó el Bentley Bentayga y para este modelo se rediseñó el motor por completo. Esta es la versión que se ha estado fabricando desde entonces y la que está montada sobre esos modelos que hay en el mercado y que mantienen el bloque. Cada motor necesita 6,5 horas para su montaje en la planta de Crewe.
Después pasa por un proceso de pruebas que exprime todo el rendimiento del motor y lo pone a punto para su instalación en el coche seleccionado. Como curiosidad, cada semana, uno de los motores producidos se somete a un proceso de pruebas intensivo y se desmonta para ser examinado, dentro del programa de control de calidad.