Como ayer informábamos, el pasado domingo tuvo lugar un accidente que, por fortuna, terminó en un susto y en varias decenas de miles de euros como daños materiales. Un helicóptero Pegasus de la DGT se estrellaba a las afueras de Robledo de Chavela, Madrid, concretamente en el km 2 de la carretera M-512.
Por suerte no hubo que lamentar más que los daños materiales de la aeronave y leves heridas para los ocupantes del helicóptero de la DGT. Sin embargo, en las últimas horas se ha conocido que el piloto de este Pegasus ha dado positivo en drogas tras realizar un test después del accidente, concretamente en cocaína y metanfetaminas.
renderAd(,44162);
Según publica El Periódico de España, el primer medio que ha comunicado esta información, el piloto trató de darse a la fuga tras ser atendido en primera instancia por los servicios de emergencia. Este piloto trató de huir hasta un pueblo cercano -Villanueva de la Cañada, según apunta el medio- para evitar el control de drogas de la Guardia Civil, donde finalmente tuvo que realizar el test.
Se enfrenta a un delito contra la seguridad aérea
“Del piloto se sabe que es funcionario de la DGT, en excedencia de un puesto anterior, mientras que su acompañante, que sí que resultó herido leve de una colisión que dejó visiblemente dañada la aeronave, también es funcionario y operador de cámara del organismo encargado del control de carreteras”.
Según parece, al piloto se le atribuye un delito contra la seguridad aérea y ya ha sido detenido. No es para menos, pues resulta casi milagroso que un accidente de helicóptero se salde con apenas heridas leves. Recordamos que, en teoría, la aeronave tuvo algún fallo y el piloto se vio obligado a realizar un rápido aterrizaje de emergencia, que por unas causas o por otras, terminó con el Pegasus