Ser el coche de serie más rápido del mundo siempre ha sido un argumento de venta para quienes producen superdeportivos. Del McLaren F1 al Pininfarina Battista pasando por Bugatti o Koenigsegg, todos han batido récords para demostrarlo.
Pero, como todo el mundo sabe, los récords están hechos para ser superados. Y es justo lo que ha hecho el Rimac Nevera de manera absolutamente soberbia reventando 23 récords de una tacada.
El más impresionante de todos es sin duda el récord del 0-400-0 km/h, ampliamente considerado como la prueba definitiva del rendimiento en línea recta de un hiperdeportivo.
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Secretismo, leyendas y accidentes de coches: ser el más rápido en carretera tiene un precio
Es una prueba en la que se pone a prueba la capacidad de aceleración, el trabajo aerodinámico, la velocidad máxima y también la potencia de la frenada.
En 2017, el Bugatti Chiron marcó un tiempo de 41,96 segundos en el 0-400-0 km/h. Un mes después, el Koenigsegg Agera RS destrozó el tiempo del Chiron al efectuar el 0-400-0 km/h en sólo 36,44 segundos.
El Rimac Nevera los ha aniquilado al efectuar ese difícil ejercicio en menos de 30 segundos, literalmente. Marcó un tiempo récord de 29,93 segundos. Es así, más de un segundo más rápido que el