El transporte de mercancías también se está acercando a la movilidad eléctrica. Se trata de convertir a los camiones pesados en vehículos eléctricos, que resulten más sostenibles y se evite la emisión de muchas toneladas de gases contaminantes a la atmósfera. Volvo Trucks lleva varios años fabricando este tipo de vehículos, añadiendo todas las mejoras que se van proponiendo en el sector.
En el caso del Volvo FE Electric y el Volvo FL Electric, dos de los modelos más populares y vendidos de la marca, se ha conseguido aumentar la autonomía que ofrecen sus baterías. Los paquetes de batería ofrecen hasta un 42% más de autonomía, pero presentan un problema: tienen un peso de 500 kg.
El peso, un problema para los camiones
Esto presenta un problema, porque cada vehículo tiene una Masa Máximo Autorizada (M.M.A.). Así que la cantidad de carga que pueden transportar estos camiones se verá afectada. Por ese motivo, desde Volvo han querido ofrecer una solución para que se pueda obtener el mejor rendimiento a esos paquetes de baterías.
Así va a ofrecer la posibilidad de colocar baterías modulares, según las necesidades de cada camión. Por ejemplo, el Volvo FL Electric tiene una Masa Máxima Autorizada (M.M.A.) de hasta 16,7 Tm y cuenta con un solo motor, que aporta una potencia de 180 kW, que equivale a 245 CV. Para garantizar la carga más adecuada, puede equipar desde tres baterías, con una carga total de 280 kWh. El máximo que puede equipar son seis baterías, con un total de 565 kWh.
Su autonomía varía entre 280 a 450 kilómetros, según las baterías que equipe.
En el caso del Volvo FE Electric tiene una M.M.A. de hasta 27 Tm. En este caso, puede equipar entre 3 a 4 baterías. Esto le permite contar con una carga entre 280 a 375 kWh y una autonomía entre 200 y 275 kilómetros. En este caso cuenta con dos motores y además puede ser utilizado con un sistema PTO. Así se llama a las prensas hidráulicas que equipan los camiones de recogida de residuos urbanos, hormigoneras y otros elementos que consumen electricidad de las baterías para funcionar. En este caso, la autonomía se reduce considerablemente.
Estos cuatro camiones, de una empresa que trabaja para BMW, funcionan con un combustible alternativo que reduce las emisiones de CO2 hasta un 90%.
La cantidad de baterías que se pueden montar en el vehículo permite que se incremente o se reduzca la capacidad de carga del camión. Así, se puede diseñar el equipamiento de baterías del camión según las necesidades de carga y autonomía en cada caso. Lo interesante es que con un paquete de baterías del mismo peso que hace unos años, se puede conseguir más autonomía.
Volvo Trucks espera que en el año 2030, la mitad de los vehículos vendidos bajo su marca sean eléctricos, algo que supondrá un avance considerable para la implantación de la movilidad eléctrica también en el transporte de cargas pesadas.