Son miles de modelos de coches diferentes los que se han comercializado desde que el automóvil se popularizó. Sin embargo, sólo una proporción muy pequeña puede ganarse la etiqueta de icono. Hoy vamos a hablar de uno de los coches más especiales de las últimas décadas, el Mazda MX-5, y de por qué precisamente es un modelo especial.
Antes de nada hay que tener en cuenta que el Mazda MX5, también conocido como Miata en otros mercados, fue presentado por primera vez en el Salón del Automóvil de Chicago de 1989. Es decir, han pasado más de 30 años desde su primer lanzamiento. En 2016 vio la luz la cuarta generación de este roadster de Mazda, que sigue siendo igual de carismática que la primera.
El Mazda MX-5 es un producto que enamora en todo su conjunto, pero la chispa que prende la mecha y te deja totalmente prendido de él salta cuando lo conduces. Y lo hace sin ser un automóvil práctico, sin ser el modelo más bello y sin ser un coche rápido. Porque sí, este Mazda es un capricho, pero un capricho muy fácil de comprender. ¿Por qué es tan especial?
Mazda MX-5, el coche deportivo más asequible del mercado
Hay que tener en cuenta que un coche puede ser muy potente y no tener ni pizca de deportividad, del mismo modo que un deportivo no tiene que ser necesariamente un vehículo con mucha potencia. Tampoco hay motivo alguno que obligue a un precio muy elevado. La deportividad es otra cosa; una filosofía más bien, que la marca de Hiroshima subo interpretar a la perfección.Suscríbete a nuestro canal de Youtube
Es como un conjunto de sensaciones. Bajo mi punto de vista, un deportivo tiene que hacerte sentir bien cuando lo conduces, tiene que pintar sonrisas en tu rostro cuando vas por una