Hace unos días tuvimos ocasión de ver el Rolls Royce La Rose Noire, el primero de los coches que bajo la denominación Droptail van a fabricarse con especificaciones muy exclusivas para cada uno de las cuatro unidades que van a salir de los talleres de la división Coachbuild. El Rolls Royce Amethyst es el segundo de estos coches, que ha sido diseñado para un cliente concreto, que permanece en el anonimato.
La inspiración para esta unidad ha llegado desde la flor silvestre Globe Amaranth, que florece en el desierto. Según la marca, este modelo captura los matices que ofrece la flor en distintas etapas de su crecimiento. Esto quiere decir que la pintura de la carrocería ha sido pintada con un color púrpura con un matiz plateado y elementos decorativos en otro tono de color púrpura con toques de color rojo, azul y violeta.
Un diseño único para un modelo único
Lo primero que vemos en este coche único es la parrilla Pantheon, que presenta una imagen cepillada y pulida. Los faros son delgados y las luces diurnas utilizan iluminación LED. La carrocería ofrece una imagen suave y fluida en la vista lateral, donde destacan con fuerza las llantas de 22 pulgadas. La sección inferior es de fibra de carbono, lo que potencia la imagen dinámica del vehículo.
Esta parte del coche está cubierta con una laca con pigmento Amatista, que según cómo le pegue la luz, crea el efecto de que tiene el mismo color que la carrocería. Es parte de lo que solicitó el cliente, que es un amante de la sutileza y estos juegos de luces que transforman el coche.
Como el cliente está relacionado con el mercado de las piedras preciosas y la amatista es una de las fuentes de inspiración del coche, el Spirit of Ecstasy tiene una base fabricada con este mineral. Pero lo que más llama la atención es la parte posterior, que tiene un gran panel fabricado en madera.
Esta es, según la propia marca, la superficie de madera más grande producida por Rolls Royce. También se considera como la superficie de madera más funcional en términos de aerodinámica que se ha montado en un coche moderno. Los especialistas de Rolls Royce han creado una plancha de madera que no solo tiene un diseño de vetas muy decorativo, sino que además funciona a la perfección a nivel aerodinámico.
Esta versión del Rolls Royce Droptail ha sido diseñada para ser uno de los cuatro coches que quieren llevar a este modelo hasta romper el límite del lujo.
El techo rígido extraíble está hecho con vidrio electrocrómico de color, a medida del vehículo. Normalmente, es opaco y presenta un tinte púrpura, a juego con la carrocería. Cuando se activa, a través de una corriente eléctrica, se vuelve translúcido y ofrece un tono que va a juego con el color Sand Dunes del habitáculo.
En este vamos a encontrar elementos decorativos como la madera de poros abiertos Calamaner Light, junto a gemas de amatista, asientos tapizados de cuero y el típico reloj analógico, que en este caso recibe el nombre de Les Cabinotiers Armillary Tourbillon. Un reloj artesanal que eleva el lujo y el detalle del coche para que sea de verdad algo único.