El modelo más popular de Škoda es el Superb, un coche que ya alcanza su cuarta generación, que será lanzada dentro de poco. Esta nueva generación llegará al mercado con novedades, tanto tecnológicas como de diseño. La carrocería principal será la familiar, pero desde la marca checa han asegurado que también estará disponible como una berlina eficiente y bastante atractiva.
Las novedades de la versión berlina del Superb traen un incremento de longitud y de altura. La primera crece en 43 milímetros, hasta alcanzar los 4.912 milímetros, mientras que la altura crece doce milímetros hasta los 4.81 milimetros. Con esta cifra, se consigue aumentar el espacio para la cabeza de 11 milímetros en la parte delantera y de seis milímetros en la trasera.
El incremento de tamaño también ayuda a incrementar el espacio en el maletero. Ha aumentado su capacidad en 20 litros, hasta alcanzar los 645 litros. Sin embargo, la anchura de 1.853 milímetros y la distancia entre ejes, de 2.841 milímetros se mantienen idénticas en esta nueva generación.
También se han mejorado aspectos como la aerodinámica y otros apartados, que permiten que el nuevo Superb sea más eficiente. En el interior también se han producido varios cambios. La pantalla del sistema de información y entretenimiento alcanza las 13 pulgadas, según la versión elegida. También se añade un sistema de Head Up Display, que muestra la información de forma más intuitiva para el conductor.
Los mandos de control también se modernizan. Se trata de tres ruedas que contienen una pequeña pantalla circular de 32 milímetros de diámetro, que pueden mostrar el elemento que están controlando. La consola central se ha rediseñado y se ha colocado la palanca de cambios en la columna de dirección.
Se han modificado la denominación de las versiones actuales, Active, Ambition y Style, por nuevas denominaciónes, Essence, Selection, Sportline y Laurin & Klement. Cada una de estas versiones tiene un acabado interior diferente, que utiliza diseños eficientes y materiales sostenibles.
Nueva tecnología Mild Hybrid
La nueva generación del Škoda Superb contará con un sistema de hibridación ligera de 48 voltios. Este se asocia al motor 1.5 TSI, que se ofrece a 150 CV. Este se asocia a un alternador de arranque accionado por correa y una batería de iones de litio. Este sistema de hibridación ligero permite que la batería ceda energía para que el motor eléctrico pueda servir de apoyo al de combustión para ofrecer potencia adicional o permitir que el coche pueda circular con la inercia con el motor apagado.
Otras opciones de motorización además de este. Una de ellas es el motor 2.0 TSI, que se puede elegir con 204 y 256 CV, mientras que el motor diésel 2.0 TDI está disponible con 150 CV y 193 CV. Todos los motores están asociados de serie a un cambio DSG de siete velocidades.