El Land Rover Defender siempre ha sido considerado como uno de los 4×4 más capaces que existen sobre el planeta pero con la última generación Land Rover ha ido un paso más allá, y es que aunque quizás ya no sea apto para realizar las locuras que se hacían con anteriores generaciones ahora también se ha convertido en un objeto de lujo.
Precisamente pero estos últimos, los que no van a pisar el monte con él, Mansory pone a su disposición un kit que lo transforma totalmente para pasar de ser el rey de las traileras a ser el rey del asfalto, porque miradas serán muchas las que atraerá. Denominado como Defender Black Edition, imaginaréis y como podéis ver en las imágenes que la propuesta de Mansory se centra un kit estético centro en el negro aunque, también, esconde sorpresas bajo su capó.
Visto de frente el Defender poco o nada tiene respecto al modelo de serie, con un frontal que se ve modificado prácticamente en su totalidad gracias a la nueva parrilla mucho más agresiva e intimidante, que junto con el parachoques delantero le proporciona una nueva mirada, nuevas entradas de aire y unas luces antiniebla LED de nueva factura. Aprovechando su altura en la parte inferior se encuentra un elaborado splitter que se une a la perfección con el parachoques.
Terminamos con los últimos cambios aportados en el frontal que llegan por parte del renovado capó con salidas de aire que ayuda en su refrigeración y, si nos fijamos un poco más arriba, veremos que sobre la luna delantera se han instalado nuevas luces LED de apoyo. Desde el lateral destacarán las carcasas a medida fabricadas para los espejos retrovisores, las cuales incluyen una especie de alerón que entendemos ayuda en su aerodinámica; sin olvidarnos tampoco de las enormes y espectaculares llantas de 24 pulgadas presididas con unos discretos faldones laterales y las salidas de aire de los pasos de rueda delanteros.
La zaga, al igual que sucede con el frontal, también se ve profundamente renovada. En primer lugar el portón se ve modificado para eliminar la localización de la rueda de repuesto de lugar original, dejando así bien visible el nombre de Mansory grabado en el mismo. A ambos lados se ha instalado nuevas molduras para las preciosas luces LED traseras, que por cierto parecen más grandes al tener una mayor anchura debido a los nuevos paneles laterales. En la parte inferior también se ha instalado un nuevo parachoques, en el que se instala un precioso difusor trasero que incluye las salidas de escape dobles. La guinda final la pone el alerón trasero dividido en dos piezas.
El interior del Mansory Defender Black Edition el preparador nos permitirá elegir multitud de materiales y colores para que el cliente de rienda suelta a su imaginación, aunque el diseño propuesto que podéis ver en las fotos no dejará indiferente a nadie. Se ha optado por la tapicería en piel de Alcántara negra con detalles en naranja como contraste, a lo que habrá que sumar las inserciones en fibra de carbono o el aluminio en otros elementos como los pedales. La nota lujosa la ponen los cientos de LED que iluminan el techo como si fuera el cielo estrellado así como el logotipo de Mansory, al más puro estilo Rolls-Royce.
Finalmente, a nivel mecánico, el Defender Black Edition de Mansory toma como base al V8 de 5.000 CC, modificando ciertas partes como la gestión del motor y la instalación de una nueva línea de escape deportiva, todo ello para conseguir una nueva potencia de 650 CV y un par motor de 870 Nm, nuevas cifras que le permiten alcanzar los 100 km/h en 4,7 segundos y lograr una velocidad máxima limitada de 250 km/h.
