Aston Martin está a un paso de volver a ser la que fue. Cierto, con la electrificación nada volverá a ser lo que fue pero a la casa de Gaydon ya le vale con seguir viva. La razón para conformarse «con tan poco» es obvia y se debe a la mala situación financiera que ha vivido durante estos últimos años. La gran suerte que ha tenido la firma es que su volumen de producción es comedido y sus gastos estructurales los ha podido contener no sin hacer algún sacrificio…
A ello hay que sumar que su primer SUV, el DBX, ha sido un auténtico éxito de ventas allá donde se ha vendido. Pero más allá de ese golpe de suerte su gran activo ha sido su imagen premium asociada a las competiciones deportivas. Si no hubiera sido por ello sus hoy «socios mayoritarios» no se hubieran fijado en ella. Y el Aston Martin Valhalla es la prueba de que está viva gracias a que aún tiene mucho que ofrecer. Y estas fotos en la pista son la clave de todo…
El Aston Martin Valhalla llegará el próximo año 2024 con 1.012 CV de potencia… gracias a su sistema de propulsión híbrido…
Como bien sabéis, porque del Aston Martin Valhalla hemos hablado muchas veces, estamos ante un modelo muy exclusivo. Tanto, como que será el primer superdeportivo que lancen al mercado con un grado de electrificación muy importante. De hecho, la magia de su tren motriz híbrido es el que le permite ofrecer un nivel de potencia que jamás hubieran podido lograr «apretando» a su mítico V12. Con el que, por cierto, no hubieran homologado sus emisiones.
El problema está en que desde que el Valhalla fue anunciado hasta que llegue al mercado se han dado cambios. No se trata solo de diseño también en