Ducati siempre ha sido sinónimo de exclusividad y deseo, unas características que se han ganado con derecho propio a base de crear modelos con los que muchos jóvenes y no tan jóvenes seguimos soñando hoy en día. Personalmente es algo que finalmente pude lograr y ser un feliz propietario de una de estas motocicletas rojas italianas, moderna, con la última tecnología disponible pero aun así, si me sobrara el dinero, sería otra Ducati la que tendría en mi garaje.
Presentada en 1994, la época dorada de las superbikes, y creada bajo el ilustre lapicero del diseñador italiano Massimo Tamburini (por el aquel entonces bajo el paraguas de Cagiva, marca a la que pertenecía también Ducati) nació la Ducati 916. Sucesora de la 888, consiguió dejar a todo el mundo con la boca abierta gracias a su diseño rompedor, de delicadas líneas que a la vez conseguían aportar agresividad en parte gracias a un grupo óptico delantero que rompía la norma general al ser de tamaño reducido, así como otros detalles exquisitos para la época como la salida doble de escape bajo el colín el basculante monobrazo.
La llegada a los concesionarios de la Ducati 916 no se produjo hasta el año 1995 pero en el 1994 la marca italiana produjo una breve tirada para poder empezar a competir esa temporada en el Campeonato de Superbikes. La jugada les salió redonda a los de Borgo Panigale, si la 916 ya enamoró al mundo desde su lanzamiento ahora lo refrendaba consiguiendo ganar el campeonato en 1994 y 1995 con Carl Fogarty a los mandos. En 1996 la 916 repitió mundial con Troy Corser debido a la marcha del bueno de Foggy a Honda, quien regresó nuevamente en 1997 a la marca italiana para repetir mundial en 1998 y 1999 a los mandos de la 916 y 996 respectivamente (ésta última la sucesora de la 916).
Tal es la huella que dejó la Ducati 916 en la historia del motociclismo que a día de hoy sigue siendo una motocicleta muy deseada y codiciada por cualquier aficionado que se precie al mundo de las ruedas, con unidades que estando bien cuidadas pueden llegar fácilmente en el mercado de segunda mano a cifras que rondan los 15.000 a 22.000 euros, precios que incluso superan a alguno de los modelos actuales de la marca italiana. Por ello la Ducati tampoco quiere que se olvide, y ya que se cumplen 30 años de su nacimiento el próximo año Ducati quiere celebrarlo con una nueva edición limitada sobre la hoy es una de sus motos más exclusivas: la Panigale V4 SP2.
La Ducati Panigale V4 SP2 30º Anivesario 916 será el homenaje de la marca italiana a la 916, una edición limitada a tan solo 500 unidades para todo el mundo que hará las delicias de todos los aficionados a las Ducati con una decoración especial, la cual se encuentra inspirada en su evolución: la 996 con la que Carl Fogarty gano el Campeonato de Superbikes en 1999 y que fue creado por el Centro Stile Ducati. De esta manera se recupera el diseño tricolor para la Panigale V4 SP2 30º Aniversario 916 pero modernizado, a lo que hay que sumar otros detalles como la parte inferior del depósito en negro, además de detalles en dorado y logotipos con efecto 3D. El diseño se redondea con la tija con el nombre grabado en láser, el número que indica la unidad, un certificado de autenticidad y una funda dedicada.
Pero la Ducati Panigale V4 SP2 30º Anivesario 916 no es solo un diseño exclusivo, también incorpora un equipamiento de serie ampliado con elementos como el tapón del depósito de combustible mecanizado en aluminio, conductos de aire para una mayor refrigeración de los discos de freno (compuesto por cierto las pinzas Brembo Stylema R más la bomba MCS con reglaje remoto), protección térmica del escape, alas aerodinámicas con diseño de doble perfil, guardabarros delantero en fibra de carbono, llantas de fibra de carbono en diseño de cinco radios, embrague seco STM EVO, tapa de embrague abierta para un uso en circuito más radical, estriberas ajustables en aluminio y sistema de telemetría Ducati Data Analyser+. Para rematar, Ducati pondrá su uso en pista más fácil con un kit compuesto por tapones para quitar los espejos y eliminar el soporte de la matrícula.