El Citroën AMI se ha convertido en el vehículo sostenible y pensado para la ciudad más popular dentro de su segmento. Un diseño atrevido, muy funcional y con espacio para moverse con libertad en la ciudad dos pasajeros, hacen del AMI una gran opción para la movilidad eléctrica urbana. Pero la marca no quiere parar ahí y ha presentado varias versiones que le dan un toque extra al vehículo urbano.
El último ha sido dejarlo en manos del diseñador Massimo Biacone. Este ha trabajado sobre el AMI y ha querido acercarlo al pasado de la marca, vistiéndolo con los colores de uno de los coches más míticos de Citroën, el 2CV Charleston. Esta versión del clásico se presentó en el Salón del Automóvil de París en 1980 y se caracterizaba por su espectaculares color de carrocería.
Esta estaba compuesto por dos colores, el Rouge Delage y el Noir, que creaban una imagen única y que ha perdurado en el tiempo. Además, el 2CV Charleston incluía varios elementos decorativos provenientes de modelos de los años de las décadas de 1920 y 1930. Esta variante convirtió los últimos 10 años de vida del modelo en un éxito absoluto, hasta el fin de producción, que llegó en 1990.
Ahora, parte de ese espíritu del clásico se ha llevado hasta el innovador AMI, que se ha vestido con estos colores y así, rinde homenaje a este coche mítico. El modelo prescinde del logotipo de Citroën, la parrilla tiene el mismo color que la carrocería y los tapacubos de las ruedas están acabados en color negro. Además, se ha añadido una lona en el techo similar a la que utiliza el Fiat Topolino.
En el interior también se han producido cambios, ya que se ha colocado un volante con un solo radio. Este es un homenaje al 2CV y le aporta un toque más clásico. También se ha añadido un bolsillo para guardar el paraguas detrás del asiento del conductor, mientras que los asientos están tapizados con cuero con diseño de patas de gallo.
No está confirmado, pero se espera que pronto se anuncie la llegada de una versión mejorada, con más potencia, una mayor velocidad máxima y más autonomía.
Los asientos se han sustituido y son más confortables, se ha añadido un sistema de audio Bluetooth, alfombrillas de goma y un retrovisor central. Esto hace que el espartano habitáculo del Citroën AMI sea más agradable y amigable. Eso sí, no hay aire acondicionado a bordo. En cuanto al motor, el AMI Charleston by Biacone mantiene las características principales del AMI.
Esto representa el motor eléctrico original de 6 kW, equivalentes a 8 CV. La batería tiene una capacidad de 5,5 kW, lo que le permite una autonomía de 70 kilómetros. Se van a fabricar 150 unidades, de las cuales ya se han vendido 37. No se conoce el precio de este modelo, pero se espera que esté bastante por encima de la versión básica del modelo.