Lada es una de esas firmas que podría ser dueña de medio mundo y no lo es. Y todo porque su pasaporte es ruso con todo lo que ello conlleva. En esencia se trata de una firma de corte low cost que sino fuera por la cerrazón del gobierno de su país y sus directivos podría vender sus modelos en todo el mundo. El problema está en que es una empresa que no sabe adaptarse a las situaciones cambiantes del sector y que, además, no tiene tecnología…
La puntilla que casi la «remata» ha sido la invasión de Ucrania por parte de Rusia. Hasta entonces tenía a Renault de su parte compartiendo tecnología y costes de desarrollo. Pero Rusia se «puso farruca» y echó a todas las marcas y eso repercutió en el abandono de Lada. Pero ellos no se achantan y anuncian una gran ofensiva de modelos que se completará con una nueva marca de coches. ¿A que cuesta creerlo? Pues ellos dicen que todo ya está en marcha.
Lada planea lanzar varias novedades a lo largo de 2024, 2025 y 2026…
Pero antes de contar cómo será, o podría ser, la nueva marca de coches de Lada vamos a hablar de la nueva gama de modelos que está planeando. La línea temporal que se ha marcado la firma rusa para lanzar al mercado esta nueva gama de modelos abarca 2024 a 2026. El primero en llegar será el Vesta que recibirá un nuevo motor 1.8 Evo asociado a una transmisión automática. Por ahora no hay detalles, aunque deberían llegar más adelante.
El Lada Largus (Dacia Logan MCV de primera generación) volverá al mercado, también, a lo largo de 2024. Y no lo haría solo porque la casa rusa anuncia que también están en disposición de incluir en la gama una versión de