En Estados Unidos, el tamaño importa. Los coches han de ser grandes, estar preparados para realizar largos trayectos y enfrentarse al trabajo más duro. Por ese motivo, no es de extrañar que se propongan vehículos que no suelen verse en Europa, con unas proporciones y unos tamaños exagerados para nuestros gustos. El Infinity QX80 se enmarca en este segmento y es capaz de plantarse frente a modelos más veteranos.
Este SUV de gran tamaño apareció en el mercado estadounidense en 2010, aunque recibió dos actualizaciones que lo mantuviero en el mercado, en 2015 y 2018. La versión que se lanzará en el año 2025 quiere mantener ese aspecto, pero mejorándolo. Lo primero que se puede ver es que utiliza el estilo de diseño denominado Artistry in Motion, que se pesentó con el concepto QX Monograph y que ha servido como base para plantear este modelo.
En el frontal podemos ver una nueva parrilla, que recupera la de Infinity, pero que según señalan desde la marca, quiere hacer que se imagine un bosque de bambú y soporta el logo de Infinity retroiluminado. Está enmarcada por unos grupos ópticos rediseñados y unas tomas de aire que mejoran la aerodinámica.
El largo capó da paso a una carrocería bien diseñada y con elementos muy aerodinámicos para hacer que este gran SUV se mueva con más suavidad. Las manijas de las puertas ayudan a restar resistencia al aire y hacer que este fluya de manera más fácil sobre el vehículo.
En el interior se ha trabajado para hacer que los ocupantes viajen con comodidad, pero además se han utilizado manteriales de calidad, con un tacto suave y agradable. La madera y el cuero forman parte de ese equipamiento decorativo y crean un habitáculo confortable y elegante. Frente al conductor encontramos una pantalla de 14,3 pulgadas, que se acompaña de otra de igual tamaño para el sistema de información y entretenimiento de igual tamaño.
El sistema de información y entretenimiento está equipado con conectividad con Google, así que ofrece todas las aplicaciones de la tienda Google Play, con Google Maps o el asistente de Google. Este sistema recibe la denominación INFINITY InTouch e incluye el asistente ProPILOT 2.1, bien equipado con sistemas de asistencia a la conducción.
Incluye cámaras delanteras Front Wide View e Invisible Hood View, que aportan una visión completa del entorno del vehículo y aporta un extra de seguridad. El sistema de audio premium Klipsch complementa el equipamiento interior del modelo.
Este vehículo se ha creado para demostrar que Toyota puede enfrentarse al reto de diseñar un descapotable y que este ofrece toda la comodidad de una berlina.
Motorización
La motorización de este modelo está compuesta por un bloque de 3.5 litros con doble compresor. Ofrece una potencia de 450 CV y un par máximo de 516 Nm. Está asociado a un cambio automático de nueve velocidades y consigue tracción en las cuatro ruedas, lo que le permite moverse con soltura por terrenos complicados. A esto ayuda también la suspensión neumática electrónica y digital dinámica, que permite contar con una conducción suave y bajo control.
El INFINITY QX80 llegará al mercado estadounidense a finales del verano y su precio arrancará en los 82.450 euros en la variante con tracción trasera básica y alcanzará los 110.595 dólares en el caso de la versión AUTOGRAPH 4WD, la más alta de la gama.