Los dispositivos móviles, como los smartphones, son ya algo habitual en nuestro día a día. El uso de los teléfonos está prohibido durante la conducción, aunque hay maneras de hacerlo en los que está permitido. Uno de los usos permitidos es como navegador mientras se viaja, pero para ello, se han de cumplir con unas condiciones específicas. El que no resulte molesto ni interrumpa la concentración en la carretera es una de ellas.
Para evitar esto, hay que contar con un soporte adecuado y que permita al dispostivo estar en la zona de visión del conductor, pero sin llegar a molestar en la visión de la carretera. El soporte ha de cumplir con las especificaciones establecidas por la DGT y estar convenientemente homologado.
Qué tipos de soporte para móviles se pueden utilizar
En el mercado hay varios tipos de soportes para móviles. Estos pueden ser de ventosa, que suelen estar colocados en el parabrisas o en el salpicadero; de pinza, que se colocan en las rejillas de las salidas de aire del salpicadero o pegados, que se sujetan con cola extrafuerte también en el salpicadero, a la vista del conductor.
Aunque todos son válidos, hay que tener en cuenta que hay unos más seguros que otros. Por ejemplo, los de ventosa no están recomendados. Suelen despegarse por efecto del calor o la humedad, así que nos podemos encontrar con alguna sorpresa durante el trayecto. Los que se enganchan a la rejilla de las salidas de aire son más seguros, aunque hay que colocarlos de manera correcta.
Es decir, cuando se colocan, hay que comprobar que están bien sujetos y que no vaya a caer durante el trayecto. Por último, los que se sujetan con cola suelen ser bastante fiables. Para ello utilizan pegatinas de doble cara, que se adhieren a la base del soporte y también al salpicadero.
Para colocarlo hay que dejar limpio este y elegir bien el sitio donde se va a colocar. Si no se elige bien y se quiere cambiar de lugar una vez pegado, se pierde efectividad en la sujeción y no se puede volver a colocar. Una vez colocado, si está homolagado, no se soltará y ofrecerá seguridad en el uso.
Los móviles suelen sujetarse mediante pinzas o con imanes. Las pinzas suelen abrirse para alcanzar bien la anchura del smartphone y luego se ajustan, sujetándolo bien. Los imanes necesitan que se coloque una placa metálica en la parte posterior del móvil. Esta no influye en el funcionamiento del smartphone y lo sujeta con fuerza para que no caiga.
De todas maneras, hay otro elemento del soporte que hay que vigilar. La parte que sujeta el móvil suele estar articulada, para poder colocarlo en la posición elegida. Se ha de vigilar que una vez elegida la posición, esta se mantenga y no gire por sorpresa. Para ello, se ha de apretar bien la tuerca de sujeción que une ambas partes.
Aún y con soporte, precaución
Aunque se disponga de un soporte para el móvil, hay que recordar que manipularlo puede hacer que se pierda de vista la carretera. Estoy puede generar situaciones de riesgo y hay que evitarlas. Por eso, hay que programar la ruta del navegador antes de mover el vehículo y no utilizar las aplicaciones de mensajería instantánea. Tampoco es conveniente realizar llamadas telefónicas, pese a contar con un sistema Bluetooth. Estas se permiten, pero pueden causar distracciones, así que es mejor parar en lugares adecuados para hablar con tranquilidad y seguridad.