Más de un millón de unidades de Kia Picanto se han vendido en el mercado europeo desde el lanzamiento de la primera generación del utilitario de Kia allá por 2004. La segunda generación llegó en 2010, y en 2017 se presentó la tercera, que ahora recibe un restyling tan profundo que casi podríamos hablar de un modelo completamente nuevo.
En el mercado español, en el que el Picanto suma más de 80.000 unidades comercializadas, el modelo más pequeño de Kia siempre ha tenido una muy buena acogida, con una cuota de mercado casi siempre entre el 10% y el 11% en el segmento de los coches urbanos. Ahora hay que ver si se mantiene este buen comportamiento, pues el Picanto ha dado un gran salto no solo en diseño: la calidad, la tecnología embarcada y el equipamiento están un escalón más arriba, lo que también ha hecho que aumenten los precios.
Nuevo diseño exterior e interior, más conectividad
Más adelante hablaremos de ello. Pero de entrada, no te pierdas el completo rediseño. Kia no se ha limitado a afinar los grupos ópticos y retocar la parrilla, ha cambiado prácticamente todo: faros delanteros y traseros, paragolpes, capó, llantas… Exteriormente hay claras diferencias entre los acabados Concept y Drive por un lado, y el GT Line por otro: este último lleva llantas específicas de 16 pulgadas en vez de 14 pulgadas (de chapa en los Concept y de aleación en el Drive), un frontal distintivo, un difusor trasero y una llamativa banda luminosa que une los grupos ópticos, tanto en el frontal como en la zaga.
La gama de colores para la carrocería refuerza ese toque juvenil que Kia consiguió dar al Picanto, sobre todo con la tercera generación del modelo. Entre los 9 colores disponibles hay cuatro nuevos, con sugerentes tonos en rojo, azul y el verde que ves en las imágenes.
Como suele suceder en estos casos, el diseño interior no cambia en la misma medida que lo hace el exterior, y las modificaciones se centran aquí en nuevos tapizados. Para las versiones básicas es de tela negra, con acabados opcionales que añaden detalles en negro brillante. Para los GT-line se opta por una tapicería en piel sintética con tonos metalizados. Se puede personalizar el habitáculo con inserciones y molduras en colores de contraste en las molduras de las salidas de la climatización y la palanca de cambios.
Pero la novedad más importante en el interior la encontramos en la parte «digital». La instrumentación dice adiós a los relojes analógicos y pasa a ser una pantalla digital de alta resolución de 4,2 pulgadas en todas las versiones, mientras que la pantalla táctil del nuevo sistema multimedia pasa a tener 8 pulgadas y ofrece de serie multiconexión Bluetooth (dos dispositivos al mismo tiempo, por ejemplo uno para usar como teléfono manos libres y otro para reproducir contenido) e integración con Apple CarPlay y Android Auto.
Además, se añaden los servicios de Kia Connect (tráfico en tiempo real, datos sobre posibles lugares para aparcar, etc) y las posibilidades de la app con el mismo nombre, que permite funcionalidades como el bloqueo y desbloqueo remoto del coche, localización del lugar en el que se ha aparcado o navegación de último kilómetro, una vez que se alcanza el destino y se aparca el coche. Tanto los sistemas de navegación como el infotainment pasan a actualizarse de forma inalámbrica.
Motores de gasolina de 1.0 y 1.2 litros, cambio robotizado opcional
Kia sigue confiando en su motor de gasolina de tres cilindros atmosférico, que se ofrece en dos versiones, con 1.0 litros y 63 CV para los acabados Concept y Drive, y con 1.2 litros y 79 CV reservado en exclusiva para el GT Line, al igual que sucedía hasta ahora. En los dos casos, la caja de cambios de serie es manual de cinco marchas.
La novedad es que como opción, para los dos motores y solo en combinación con el acabado GT Line se ofrece una nueva caja de cambios robotizada, en vez de la anterior caja automática de 5 marchas con convertidor de par, que tiene un sobreprecio de unos 900 euros. Un elemento a tener en cuenta, sobre todo en un coche de carácter urbano como este. Claro que un Picanto GT line con motor 1.2 y cambio AMT se va hasta los 21.435 euros, y eso son ya palabras mayores: por ese precio puedes ya acceder a coches justo de la categoría superior.
Gama y precios del Kia Picanto
Y es que el Picanto ha subido un peldaño en calidad y equipamiento, pero también en precio. Con el descuento actual, que está entre 420 y 440 euros según versiones, el Picanto más accesible, el 1-0 DPI Concept, cuesta 16.527 euros, y el 1.2 GT Line parte desde 20.510 euros.
La versión más recomendable si buscas un utilitario con el que moverte por ciudad con bajo consumo y sin invertir lo que cuesta el acabado GT line es la versión Drive, que cuesta 700 euros más que el Concept, pero añade llantas de aleación, reposabrazos central, altavoces traseros y algún que otro detalle decorativo. El «capricho» del acabado deportivo GT-Line sale caro, pero tiene de todo: llantas de 16 pulgadas, diseño GT line exterior e interior, luces diurnas LED, retrovisores exteriores plegables eléctricamente, lunas oscurecidas, climatizador, llave inteligente, arranque por botón y cargador inalámbrico para el móvil.
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