Ford anunció que tenía intención de interrumpir la comercialización de coches con motor de combustión a partir del año 2030. Pero ahora, parece que esa fecha se podría retrasar hasta más allá de ese año. ¿Cuál es el motivo de esta nueva decisión? Al parecer, se une a otras marcas, que ven como poco probable que la fecha del fin de comercialización de coches con motores de combustión se produzca el año 2035, como se había planeado desde la Unión Europea.
Los coches eléctricos no parece que tengan la implantación que se esperaba de ellos y no hay tantas ventas como se preveían. Así que las marcas se plantean retrasar el paso a vehículos con tracción eléctrica todo lo posible. Esto no quiere decir que Ford dejará de lado la electrificación de sus modelos, sino que continuará con versiones con motor tradicional unos años más.
Según un artículo publicado en Automotive News Europe, Martin Sanders asegura que la demanda de coches eléctricos no ha sido la esperada. Pero una de las opciones que baraja Ford en estos momentos es averiguar si hay una demanda creciente de coches híbridos enchufables y atenderla desarrollando modelos con ese tren de tracción híbrido.
Por el momento, Ford ha asumido serios retos al eliminar del mercado modelos con una larga trayectoria en el mercado. En el mes de abril de 2022 se discontinuó la fabricación del Ford Mondeo en la planta de Almussafes, mientras que en diciembre de ese mismo año se discontinuó el EcoSport.
El mes de julio de 2023 salió de la línea de montaje de Colonia el último Ford Fiesta, uno de los grandes modelos de la marca estadounidense. Por su parte, los monovolúmenes S-Max/Galaxy dejaron de producirse en Almussafes en abril de 2023. Queda todavía el Ford Focus, que tiene como fecha de fin de producción el año 2025, así que Ford va a quedarse en breve sin sus mejores bazas para vender en Europa.
En el apartado eléctrico, Ford prevé estrenar una versión eléctrica del Puma a finales de 2024. Este recibirá la denominación E-Gen y se ensamblará en la planta rumana de Craiova. Otro vehículo eléctrico que llegará será el Explorer eléctrico, que se montará sobre la plataforma MEB de Volkswagen, que comenzará a ser producido este próximo mes de junio en la planta de Colonia.
También está previsto el lanzamiento de un SUV que sería muy similar al Volkswagen ID.5, un SUV eléctrico que podría recuperar el nombre del Capri. Pero todo ello, está sujeto a ese cambio de planificación y a las novedades que presente Ford a lo largo de los próximos meses, para seguir teniendo modelos con motor de combustión en el mercado europeo.