El internet y la industria digital generan emisiones anuales similares a las de la aviación, con datos almacenados en centros de datos que consumen mucha energía. Para minimizar este impacto ambiental, es crucial repensar nuestras acciones en línea. Aquí te presentamos cuatro maneras efectivas para reducir tu huella de carbono digital y contribuir a un futuro más sostenible.
Pensar antes de hacer clic
Cada documento, foto y correo electrónico que enviamos, así como cada «me gusta» o comentario en redes sociales, viaja a través de múltiples capas de infraestructura de internet que consumen mucha energía, incluidos los servidores en centros de datos gigantescos. Guillaume Pitron, periodista francés, describe en su libro «The Dark Cloud» cómo el mayor centro de datos del planeta, al sur de Beijing, ocupa una superficie equivalente a 110 campos de fútbol. Estos centros generan calor que debe ser disipado mediante sistemas de aire acondicionado o agua fría, en su mayoría alimentados por carbón.
Para reducir mi uso de datos, comencé con pequeños cambios: me di de baja de boletines no deseados y eliminé aplicaciones que no utilizaba en mi teléfono. Además, evito usar IA generativa para respuestas simples, ya que consume de cuatro a cinco veces más energía que una búsqueda web convencional.
Eliminar el desorden virtual
Muchos de nosotros acumulamos miles de correos electrónicos antiguos o no leídos y duplicados de fotos. Eliminar estos elementos regularmente puede ayudar a reducir tu huella digital. Los buzones de correo permiten buscar por tamaño de archivo, y he hecho un hábito de buscar «1MB o más» y eliminar correos electrónicos con archivos adjuntos grandes que ya no necesito. Buscar por nombre de remitente también permite eliminar cientos de correos de marketing en un solo clic.
En mi vida profesional y personal, tomo cientos de fotos en formato RAW, que es de dos a seis veces más grande que el JPG, por lo que soy diligente en eliminar duplicados casi de inmediato. Tanto Android como iPhone ofrecen funcionalidades básicas de eliminación masiva de fotos y archivos. También puedes probar la aplicación GetSorted, que divide las tareas de limpieza de fotos en partes manejables.
Minimizar el almacenamiento en la nube
Para el próximo año, se espera que la industria digital se convierta en el cuarto mayor consumidor de electricidad del mundo, solo detrás de China, India y EE.UU. Para reducir mi dependencia del almacenamiento en la nube, he optado por soluciones analógicas. Almaceno todas mis fotos y archivos en discos duros protegidos con contraseña, que solo usan energía cuando están conectados. Hago copias de seguridad trimestrales en dos copias, una de las cuales se guarda en casa de un amigo en caso de incendio o robo en mi hogar.
Este sistema puede ser demasiado engorroso para la mayoría, por lo que las limpiezas regulares de los archivos que decides almacenar en la nube se vuelven más importantes.
Mantener los dispositivos el mayor tiempo posible
Aunque es tentador actualizar continuamente al último dispositivo, los nuevos gadgets tienen un alto costo ambiental. Según el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente, la fabricación de un smartphone representa aproximadamente el 80% de sus emisiones de carbono a lo largo de su vida útil. Por lo tanto, cuanto más tiempo usemos un dispositivo, mejor. Los teléfonos y computadoras reacondicionados se están volviendo más comunes, y sitios web comunitarios de TI como ifixit.com pueden ayudarte a reparar productos tú mismo.
Incluso limpiar el desorden cibernético puede ayudar a prolongar la vida útil de tu dispositivo. La profesora asociada de geografía humana de la Universidad de Macquarie, Dr. Jessica McLean, señala que su computadora funcionaba lentamente porque tenía muchos videos y documentos grandes almacenados que consumían mucha memoria. Después de eliminarlos, su computadora comenzó a funcionar nuevamente.
Abogando por un cambio sistémico
Aunque los cambios individuales son importantes, la Dra. McLean, autora de un libro sobre el impacto ambiental de la actividad digital, advierte que la carga de la contaminación digital no puede recaer solo en los individuos. «Necesitamos ser parte de un cambio estructural sistémico», dice. «Eso significa tomar oportunidades individuales para intervenir, pero también exigir y esperar que nuestros gobiernos regulen mejor a las corporaciones y cambien a opciones neutrales en carbono».
Para abordar la crisis climática de manera efectiva, es esencial combinar esfuerzos individuales con cambios sistémicos. Esto incluye desde la implementación de políticas que promuevan energías renovables hasta la mejora de la eficiencia energética en la infraestructura digital. Solo a través de una acción concertada y un compromiso colectivo podemos lograr un futuro más sostenible y reducir significativamente nuestra huella de carbono digital.
El artículo La cara oculta de internet: 4 estrategias para reducir tu huella de carbono aparece primero en Driving ECO.