Con los SUV como principales protagonistas del mercado es normal que cada marca tenga alguno que se considere importante y si hablamos de BMW ese modelo en cuestión sería el X3, un SUV premium del que ya sabíamos que se encontraba a punto de desvelar su nueva cuarta generación y que finalmente tenemos aquí, la cual además no tardará en llegar a los distintos mercados europeos.
Ya no nos resulta raro que cada nueva generación de un modelo que se presente crezca en tamaño respecto a su predecesor y el BMW X3 no iba a ser diferente, con una longitud 34 mm mayor que se sitúa ahora en 4.755 mm y una anchura 29 mm también mayor para llegar a 1.920 mm. En cambio, resulta curioso que su altura se rebaja en 25 mm para quedar fijada ahora en 1.660 mm y que sin duda ayuda a que el nuevo X3 presente una imagen más imponente porque sí, el diseño obviamente también es nuevo.
Y en lo que se refiere al diseño necesito que pase más tiempo para que me entre por el ojo porque no lo acabo de ver, de momento la generación saliente me parece más bonita y es que este nuevo frontal con unas líneas mucho más suaves contrasta en exceso con la parrilla, unos riñones que por su puesto son enormes y en el que se combina un patrón de barras verticales y diagonales. Todo el grupo óptico delantero es LED y los faros tiene ahora una forma de L mucho más pronunciada, la cual se refleja en la nueva firma lumínica que presenta.
Será desde la vista lateral donde mejor apreciaremos el aumento de tamaño del BMW X3 aunque a pesar de ello seguirá contando con una silueta en la que se mezcla elegancia y deportividad, con los faldones y la línea de techo como principales valedores, contribuyendo también en gran medida los pasos de rueda ensanchados mediante una forma acampanada y bajo los que se alojan las llantas de 18 pulgadas equipadas de serie. En la zaga tenemos una parte superior con un prominente alerón con unos deflectores laterales que aumentan en tamaño enmarcando así la luna trasera; un poco más abajo nuevo grupo óptico y parachoques trasero con líneas más visibles que el delantero y en el que, por desgracia, se integran de manera invisible en su parte inferior las salidas de escape salvo para la versión deportiva M50 xDrive.
La cabina del nuevo BMW X3 cambia sustancialmente y se adapta a las últimas presentaciones de la marca, modificando totalmente su salpicadero para integrar la BMW Curved Display compuesta por una pantalla de 12,3 pulgadas y otra pantalla de 14,9 pulgadas bajo un mismo marco, ambas funcionando bajo el nuevo BMW iDrive dirigido por el Sistema Operativo 9 de BMW. Esto supone que muchos botones son eliminados ampliando las posibilidad funcionales del sistema de infoentretenimiento, dejando así solo los estrictamente necesarios y mostrando un diseño más limpio para la consola central.
En términos de diseño también destacan los nuevos volantes con la parte inferior achatada, la nueva palanca selectora para las marchas o la luz ambiental que recorre la consola central y que contrasta con las que se sitúa en las molduras de las puertas en su parte delantera, rodeando los botones de función, los controladores de ventilación, las rejillas de ventilación y las manillas. De serie se encuentra equipado con asientos deportivos calefactables y con regulación eléctrica tapizados en Econeer, quedando las tapicerías Merino Veganza y BMW Individual como opcionales. Destacar que el maletero registra una capacidad de 570 litros, ampliables a 1.700 litros si abatimos los asientos.
Mecánicamente no hay novedades extremadamente importantes pero si las hay. En lo que se refiere a los motores gasolina el BMW X3 seguirá contando con una gama conocida en potencias que van desde los 190 CV a los 398 CV del deportivo M50 xDrive; mientras que la opción diésel correrá a cargo del motor de 2 litros con 197 CV. Todos ellos hacen uso de la tecnología mild-hybrid de 48 V así como de la transmisión automático Steptronic de ocho velocidades que envía la potencia a las cuatro ruedas junto con la tracción xDrive.
Donde si tendremos cambios importantes es en la versión híbrida enchufable 30e xDrive, en la que aunque se sigue haciendo uso de un motor de cuatro cilindros y 2.0 litros junto con otro eléctrico integrado en la caja de cambios Steptronic generando una potencia combinada de 229 CV la autonomía en modo totalmente eléctrico aumenta, concretamente se sitúa entre los 81 y 90 kilómetros gracias al uso de una batería de mayor capacidad.
Como os decía más arriba, no tardaremos en conocer los precios y el equipamiento de la gama que llegará a España del nuevo BMW X3, ya que la marca confirma que su llegada a los concesionarios se producirá durante el cuatro trimestre de este año.
