Como ya sabrás, si nos lees de forma asidua, a partir de julio de 2022, todos los coches nuevos homologados en la Unión Europea deben estar equipados con un dispositivo de registro de datos de eventos (EDR), o Event Data Register, también conocido como «caja negra».
Esta medida, que forma parte del Reglamento General de Seguridad Vial, tiene como objetivo principal mejorar la seguridad en las carreteras europeas. Sin embargo, no muchos saben qué es este dispositivo, y para qué sirve, por eso, aquí vamos a hacer esta introducción a él…
A pesar de que se llama caja negra, lo cierto es que la caja no es negra. En los aviones, que son unos vehículos que llevan usando estas unidades FDR (Flight Data Register) desde hace mucho tiempo, tampoco son negras, sino que son naranjas o de colores llamativos que faciliten su visualización para encontrarlas en caso de accidente. En el caso de los coches no necesitan tener esos colores tan llamativos, pero tampoco van a ser estrictamente negras…
¿Qué es un EDR y cómo funciona?
Un EDR es un sistema electrónico que registra información crucial sobre el funcionamiento del vehículo y el comportamiento del conductor en los segundos previos, durante y después de un accidente grave. Los datos almacenados en la caja negra pueden incluir:
Velocidad del vehículo en el momento del accidente.
Aceleración o desaceleración del vehículo antes y durante el impacto.
Si el conductor estaba frenando y con qué intensidad.
Uso del cinturón de seguridad. Si los ocupantes del vehículo llevaban el cinturón de seguridad abrochado.
Activación del airbag, si se desplegaron los airbags y en qué momento.
La dirección en la que circulaba el vehículo.
Rotación del vehículo durante el impacto.
Incluso los sonidos grabados dentro y fuera del vehículo, como el ruido del motor, los frenazos o las voces de los ocupantes.
Gracias a esto, se podrán