Cadillac ha vuelto al mercado de lujo, algo que tenía bastante abandonado los últimos años. Su propuesta más reciente se basa en el Cadillac Celestiq y presenta una carrocería descapotable, con una imagen que ofrece un aspecto lujoso, centrado en el tiempo libre, el sol, los viajes y la espectacularidad que ofrece su techo descapotable.
Al estar basado en el Celestiq, se notan las aportaciones de este modelo conceptual. La gran parrilla negra con acabado cristalizado marca el frontal del coche, junto con dos faros verticales que le aportan un toque extra a la imagen innovadora. Estos se encienden y apagan con una secuencia luminosa para dar la bienvenida al conductor o despedirse de él.
En el parabrisas se ha utilizado un marco de aluminio macizo, terminado con el color Aurora, que es exclusivo para este modelo. Las dos puertas se abren en un ángulo de casi 90º, que permiten el acceso más sencillo a la parte trasera. Las manijas se han sustituido por botones que se integran en la carrocería por debajo de la línea de la cintura, así que la estética es más discreta y atractiva.
En la zaga encontramos un diseño totalmente exclusivo para este modelo conceptual. La delgada barra de luces trasera se une al emblema de la marca, ofreciendo la imagen atractiva y dinámica que se espera de un coche de estas características. La carrocería está acabada en el color Manila Cream, que se utiliza en la carrocería de Cadillac desde 1957. El techo es de tela metalizada Daybreak, así que ofece un contraste muy atractivo.
El interior también marca la diferencia
Este modelo está destinado a convertirse en el buque insignia de la marca, así que el interior se ha dotado con elementos muy atractivos y de calidad. Una gran pantalla de 55 pulgadas, y es lo que atrae todas las miradas. Pero cuando te paras a mirar los detalles del habitáculo, puedes encontrar elementos con un nivel de acabado muy elevado.
El interior tiene acabados en madera, para lo que se han utilizado cinco tipos de madera. Se ha trabajado a mano para colocarlo en puntos muy concretos del interior. En cuanto a los asientos, este concepto se han decorado con un acabado que representa un rayo de sol sobre el recubrimiento de Nappa, que cuenta con un pigmento iridiscente rosa que crea un sutil efecto de amanecer que cambia de color. Esto, junto con el diseño con perforaciones, bordados y un acolchado pensado para mejorar el confort, ofrece un acabado de lujo.
También se ha utilizado un material que proviene de los hongos. Se trata del Fine Mycellium, que es lo que ayuda a regenerarse a la raíz de los hongos. Este material se ha colocado en las puertas y las alfombrillas, y se espera que este material pueda tener un uso más extendido en el futuro.
La consola central está cubierta con molduras de madera y se ha colocado una bandeja para bebidas en la parte trasera, además de varios compartimentos para guardar pequeños objetos. También ofrece una pequeña nevera en la parte trasera, que en este caso equipa una elegante jarra y dos copas. Es un modelo conceptual y ha de presentar todas sus capacidades de forma impecable.
Lo que no sabemos es de qué es capaz en materia de rendimiento. Si nos fijamos en el Celestiq, nos encontramos con una batería de 111 kWh, que alimenta a dos motores eléctricos que ofrecen una potencia total de 447 kW, lo que equivalen a 600 CV y un par máximo de 867 Nm. Con esta configuración, el modelo ofrece una autonomía de 483 kilómetros.