La creciente demanda de energía de los centros de datos impulsados por la inteligencia artificial está generando un resurgimiento en la energía nuclear. Empresas tecnológicas y grandes figuras como Bill Gates y Jeff Bezos están invirtiendo en startups nucleares para satisfacer esta necesidad. Este artículo explora cómo la IA está impulsando este renacimiento nuclear y las implicaciones futuras.
Un resurgimiento nuclear impulsado por la IA
Hace un año, mientras el auge de la inteligencia artificial ganaba impulso, Oklo, la startup de energía nuclear respaldada por Sam Altman de OpenAI, estaba en conversaciones para suministrar megavatios de energía a sus clientes. Hoy en día, esos mismos clientes demandan 1,000 veces más energía. Jacob DeWitte, director ejecutivo de Oklo, comentó que la rapidez y la magnitud del aumento en la demanda han superado todas las expectativas.
El detonante de este aumento fue la explosión del interés en la inteligencia artificial generativa cuando ChatGPT mostró al mundo las maravillas de la IA. Organizaciones de todo tipo han aumentado el desarrollo de aplicaciones de IA, lo que está elevando la demanda de centros de datos que requieren una gran cantidad de electricidad. De repente, la tecnología nuclear, antes marginada, comenzó a parecer atractiva, especialmente para las empresas tecnológicas que necesitan grandes cantidades de energía.
Inversiones tecnológicas en energía nuclear
Aunque la cantidad de energía que la energía nuclear proporcionará para satisfacer la demanda de los centros de datos es incierta, gigantes tecnológicos como Amazon, Microsoft y Google han apostado por el suministro de energía nuclear. Bill Gates se ha convertido en un importante inversor en esta tecnología, mientras que Jeff Bezos respalda una startup nuclear en Canadá.
En términos del mercado de valores, Oklo, que aún no ha entregado un reactor comercial en funcionamiento, ha tenido un desempeño modesto, con acciones por debajo de su precio de salida a bolsa de 2021. Sin embargo, otras acciones de servicios públicos y proveedores han mostrado un crecimiento significativo. Constellation Energy ha subido un 88% en 2024, Vistra un 139%, y Public Service Enterprise un 26% tras un reciente aumento.
La creciente demanda de energía de los centros de datos
La Agencia Internacional de Energía (IEA) informa que hay más de 7,000 centros de datos en operación o desarrollo en todo el mundo, un aumento respecto a los 3,600 de 2015. En los EE.UU., McKinsey & Co. proyecta que la demanda de energía de los centros de datos crecerá alrededor de un 10% anual hasta el final de la década. En 2022, los 2,700 centros de datos consumieron aproximadamente el 4% de la electricidad total de EE.UU., y se espera que para 2026 representen el 6%.
Goldman Sachs proyectó en abril que los centros de datos en EE.UU. utilizarán el 8% de la energía total para 2030. Este aumento en la demanda está impulsando a las empresas tecnológicas a buscar fuentes de energía más sostenibles y confiables, siendo la nuclear una opción prominente.
El papel de Gates y Bezos en la energía nuclear
En la conferencia anual de la Sociedad Nuclear Americana en junio, un ejecutivo de Microsoft mencionó que la necesidad de electricidad de la compañía, manejable hace cuatro años, ha aumentado exponencialmente con el auge de la IA. «Necesitamos el desarrollo continuo de recursos limpios y firmes, y la nuclear cumple con esos requisitos», dijo Adrian Anderson, gerente general de energía y sostenibilidad en Microsoft.
Amazon y Alphabet también han colocado la energía nuclear baja en emisiones como una de sus principales fuentes para sus centros de datos. En 2021, Jeff Bezos y otros inversores recaudaron más de $130 millones en capital de riesgo para General Fusion, una empresa nuclear con sede en Columbia Británica. Google inició una ronda de financiación de $250 millones para TAE Technologies, una startup de fusión nuclear.
En junio de 2023, Microsoft firmó un acuerdo con Constellation Energy para añadir electricidad generada por energía nuclear, libre de carbono, para sus centros de datos en Virginia. Amazon pagó $650 millones en marzo por un campus de centros de datos alimentado por energía nuclear en Pensilvania.
Desafíos y perspectivas futuras
A pesar de las inversiones y el entusiasmo, el desarrollo nuclear enfrenta desafíos. La Comisión Reguladora Nuclear denegó la solicitud de Oklo para su planta en Idaho en 2022, citando la falta de información de seguridad. Sin embargo, Oklo sigue confiando en que los reguladores federales aprobarán el proyecto, con planes para desplegar energía en 2027.
La energía nuclear parece ser una opción prometedora para satisfacer la creciente demanda de energía impulsada por la inteligencia artificial. Sin embargo, la integración de esta tecnología en la infraestructura existente y la superación de barreras regulatorias y de seguridad serán cruciales para su éxito. Con la inversión y el apoyo de figuras tecnológicas prominentes, el futuro de la energía nuclear podría estar en el centro de la revolución energética del siglo XXI.
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