La evolución del sector del automóvil está obligando a los fabricantes a medir sus pasos. Stellantis, hasta ahora, era la referencia a seguir por los excelentes resultados económicos que ha cosechado. Sin embargo renovar toda su gama y apostar por la electrificación ha pasado factura en sus libros de cuentas. Tanto, que ya hay quien avisa que su futuro podría ser más oscuro que claro a tenor de la gran cantidad de marcas que aglutina bajo su tutela.
Como sabes Stellantis nació fruto de la unión de FCA Automobiles y Groupe PSA. El primero dio al grupo enseñas como Abarth, Alfa Romeo, Chrysler, Dodge, Fiat, Jeep, Lancia, Maserati y RAM. El segundo llevaba Citroën, DS, Opel, Peugeot y Vauxhall. Con todo, el solapamiento de gamas es más que evidente sobre todo en Europa que es el principal mercado donde operan sus firmas. Y para evitar problemas y caídas de beneficios algunas podrían morir.
Stellantis ha visto reducidos sus beneficios en el primer semestre un 48%…
El año 2023 fue de auténtico récord para Stellantis. El conglomerado italo-galo-americano conseguía beneficios que jamás habíamos visto en otros grupos y, lo más importante, en un breve periodo de tiempo. Sin embargo parece que la alegría ha durado poco porque durante el primer semestre del presente año 2024 las cosas se han complicado. No están en la cuerda floja pero ver caer sus beneficios netos un 48% es mucho para un grupo de su entidad…
Si vamos al lado de los ingresos la cifra es menor, con un 14% de caída. No obstante, estamos ante un grupo que está presente en todo el mundo y donde en los últimos meses han perdido cuota de mercado. Sobre todo en EEUU donde las marcas locales Chrysler, Dodge y RAM no son capaces de acercarse a sus rivales. Y no solo