La normativa para reducir las emisiones no solo ha traído cosas positivas al mundo del motor, también ha hecho que los motores pierdan potencia con los catalizadores, ya que el diseño y geometría del sistema de escape es fundamental para extraer la máxima potencia del motor.
En este artículo te introducimos a la teoría sobre el origen de esta pérdida de rendimiento y sobre la famosa Curva de Gancho, que tiene mucho que ver con esto…
¿Por qué los catalizadores afectan a la potencia del motor?
La introducción de los catalizadores de tres vías a principios de los 90, en cumplimiento de las normativas Euro 1, supuso un cambio significativo en la tecnología de los motores de combustión interna. Aunque estos dispositivos son fundamentales para reducir las emisiones contaminantes, su implementación inicial tuvo un impacto negativo en ciertos aspectos del rendimiento del motor, como la potencia y el consumo de combustible. Los motivos de estos problemas se basan principalmente en:
Cambio en la relación aire-combustible (estequiometría)
La introducción del catalizador de tres vías obligó a los motores a operar con una mezcla aire-combustible estequiométrica (relación exacta de 14,7:1). Esta relación es necesaria para que el catalizador funcione de manera óptima y reduzca las emisiones de NOx, CO y HC. Por tanto, los motoristas tuvieron que adaptar las mezclas a dicha norma, y no tanto para optimizar el rendimiento y consumo del motor. La mezcla estequiométrica representa un punto de equilibrio entre la máxima potencia y la máxima eficiencia. Sin embargo, este punto no es óptimo para maximizar ninguna de las dos características.
Antes de los catalizadores, los motores podían ajustar la relación aire-combustible según las condiciones de funcionamiento, priorizando la potencia a altas cargas o la eficiencia a bajas cargas. Con el catalizador, esta flexibilidad se vio limitada.
Dosado se refiere a las dosis o proporciones de