En 2023, los empleos en la industria solar de EE. UU. aumentaron un 6 %, alcanzando un máximo histórico de 279.447, según un estudio del National Solar Jobs Census. El crecimiento estuvo impulsado por la expansión de proyectos residenciales, aunque los altos tipos de interés y la reducción de incentivos en California ralentizaron el ritmo. Este auge laboral es parte de la promesa del presidente Joe Biden de crear millones de empleos mediante la transición hacia energías limpias. Sin embargo, los expertos advierten que el crecimiento del empleo solar podría estabilizarse en 2024 debido a los desafíos en la instalación de proyectos a gran escala.
Un crecimiento histórico impulsado por la demanda residencial
En 2023, la industria solar en Estados Unidos alcanzó su mayor nivel de empleo registrado, con 279.447 puestos de trabajo, un aumento del 6 % en comparación con el año anterior. Este crecimiento estuvo impulsado, en gran medida, por la expansión de proyectos de instalación residencial, que añadieron 5.945 nuevos empleos, alcanzando un total de 100.815 trabajadores en el sector. Sin embargo, este incremento, aunque significativo, fue menor que el crecimiento del 11 % registrado en 2022. La ralentización se debió principalmente a los altos tipos de interés y a la reducción de incentivos en estados clave como California, donde la instalación de sistemas solares en tejados tuvo un freno importante.
El informe anual del National Solar Jobs Census, elaborado por el Interstate Renewable Energy Council (IREC), subraya que este aumento en el empleo solar responde, en parte, a la recuperación de los proyectos a escala industrial. La menor cantidad de interrupciones en las cadenas de suministro, que afectaron gravemente al sector durante la pandemia de COVID-19, y las nuevas medidas del gobierno de EE. UU., como la Ley de Reducción de la Inflación de 2022, permitieron retomar el ritmo de instalación de grandes plantas solares. Este segmento, que incluye proyectos solares a nivel de servicios públicos, añadió 1.888 empleos en 2023, alcanzando un total de 29.708. Sin embargo, se anticipa que la capacidad de la industria para continuar este crecimiento podría verse afectada en el futuro cercano.
El impacto de la Ley de Reducción de la Inflación y desafíos en 2024
El crecimiento de los empleos en el sector solar ha sido uno de los resultados más destacados de las políticas implementadas bajo el mandato del presidente Joe Biden, cuyo objetivo es crear millones de empleos vinculados a la transición energética hacia fuentes libres de carbono. La Ley de Reducción de la Inflación, promulgada en 2022, ha sido clave para impulsar el sector al otorgar incentivos fiscales a empresas y consumidores que optan por fuentes de energía limpia, como la solar. Este marco legal, junto con una menor dependencia de combustibles fósiles, ha estimulado la demanda de energía solar, tanto a nivel residencial como a gran escala.
El sector manufacturero de la industria solar en Estados Unidos ha mostrado un crecimiento más moderado en comparación con otros segmentos, con 33.273 empleos en 2023, una cifra que se mantuvo prácticamente sin cambios respecto al año anterior. Este estancamiento se debe en parte a que las empresas que producen componentes como inversores y sistemas de soporte han logrado aumentar su eficiencia laboral, reduciendo la necesidad de más trabajadores a pesar del crecimiento en la demanda de productos.
A medida que las plantas manufactureras se automatizan y optimizan, la creación de nuevos empleos en este sector podría no seguir el mismo ritmo que otras áreas, como la instalación residencial o los proyectos a escala industrial.
Un futuro incierto para el empleo solar en EE. UU.
A pesar del crecimiento sostenido de los últimos años, el panorama para el empleo solar en 2024 es incierto**. Aunque la demanda de energía limpia sigue siendo fuerte, factores como el aumento de los tipos de interés** y la disminución de incentivos en mercados clave podrían frenar la expansión de las instalaciones residenciales. Esto, sumado a la falta de mano de obra calificada y las dificultades para conectar nuevos proyectos a la red eléctrica, ha generado preocupación en la industria sobre su capacidad para mantener el ritmo de crecimiento laboral.
Sin embargo, la industria solar sigue siendo una de las más prometedoras dentro del sector energético. Las metas a largo plazo de descarbonización y el compromiso de las empresas y gobiernos con la energía limpia sugieren que, si bien 2024 podría ser un año de consolidación más que de expansión, las oportunidades de crecimiento en el mediano y largo plazo son considerables. La capacidad del sector para adaptarse a los desafíos regulatorios y económicos será clave para asegurar que el empleo en energía solar siga creciendo y contribuyendo a la transformación del panorama energético en Estados Unidos.
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