Si hace unos años os dijésemos que Hyundai tendría un elenco de vehículos deportivos seguramente no nos creeríais, y si os hubiésemos dicho que sacarían un B-SUV deportivo nos tacharíais de locos como mínimo. Pues así es señoras y señores, la casa coreana se encuentra a punto de aumentar la familia N con un nuevo integrante; y no, nos referimos al exultante i20 N, sino al Kona, un modelo que ha sucumbido ante los encantos del departamento deportivo de Hyundai. Y es que ya ha sido avistada una mula de pruebas rodando por Nürburgring a toda velocidad y emanando un embriagador sonido.
Fue hace unos pocos años cuando la firma surcoreana decidió poner los puntos sobre las íes para derrocar a esa hegemonía europea que durante tantos años había estado en pie. Una importante renovación de su gama de modelos, una relación calidad-precio difícil de superar y la letra N como nuevo sinónimo de deportividad fueron los argumentos que permitieron a Hyundai volver al juego con más fuerza que nunca.
La marca, consciente del éxito de esta fórmula, ha decidido seguir exprimiéndola un poco más, motivo por el que el Kona será otro modelo que porte el aclamado distintivo N. Por supuesto el atronador silencio que rodea a esta nueva variante del SUV urbano nos obliga a vaticinar algunos de sus detalles, pero el prototipo que ha sido cazado sobre el asfalto del Infierno Verde nos resulta bastante revelador.
A nivel estético nos encontraremos con un Hyundai Kona mucho más imponente y agresivo, rasgos que se acredita gracias a un defensa más tosca, a un difusor mucho más prominente y una suspensión rebajada. A esto también debemos sumarle una desmesurada doble salida de escape que sirve como principal canal de difusión de su pegadiza banda sonora.
Pero el verdadero punto álgido de toda nueva creación lo encontramos siempre en el apartado mecánico, y el caso del Kona N no iba a ser una excepción. Podemos intuir que el SUV coreano compartirá corazón con su hermano, el i30 N, por lo que estaríamos hablando de un cuatro cilindros sobrealimentado por turbo capaz de erogar 275 CV en la versión Performance y 250 CV en la más comedida.
Aún es pronto para determinar una fecha de llegada, puesto que todo apunta a que será el i20 N el que tome la delantera en la ampliación de la familia N. De esta forma, Hyundai sigue adelante con una expansión de vehículos deportivos que poco a poco está poniendo contra las cuerdas a sus rivales más directos.