Visto el actual panorama en la industria del automóvil, si dentro de veinte años queremos seguir disfrutando de hiperdeportivos de más de 1.000 CV de potencia tendremos que subirnos al carro de lo eléctrico, y esto es lo precisamente ofrece el prometedor Hyperion XP-1, un vehículo propulsado por pila de hidrógeno y que se espera para finales de 2021.
1.000 CV eléctricos con tecnología de la NASA
El secreto de este hiperdeportivo con sello californiano impulsado por motores eléctricos capaces de proporcionar 1.000 CV radica en la forma de obtener la electricidad para alimentar esos propulsores, y es que en lugar de recurrir a las tradicionales baterías de iones de litio cuenta con una pila de combustible de hidrógeno. Esto es toda una ventaja, para empezar se eliminan esas baterías reduciendo considerablemente el peso total del vehículo, y con ello mejorando su dinámica, prestaciones y aumentando la autonomía.
Precisamente es la autonomía su mejor baza, ya que con un tanque completo es capaz de cubrir una distancia superior a 1.000 millas (unos 1.600 km), y eso es debido a que el hidrógeno que lo alimenta puede comprimirse en el depósito, aumentando la cantidad total de este gas. Además, con un tiempo de repostaje similar al empleado en un vehículo tradicional solventa ese gran hándicap del tiempo de recarga en un eléctrico, y aunque ésto último mediante carga ultra rápida, como la de 300 kW ofrecida en el Lucid Air, pueden paliar ese problema, la degradación de sus baterías es más acusada recurriendo a esas potencias. No obstante, la infraestructura para repostar hidrógeno es muy, muy limitada, incluso en Estados Unidos, país de desarrollo del Hyperion.
En cuanto a su sistema de propulsión, que según afirma Angelo Kafantaris, CEO de la compañía, cuenta con tecnología heredada directamente de la NASA, sólo emite como residuo agua,