Bien sean clásicos, bien sean de nueva hornada, bien sea bajo la luz de los focos o bajo una intensa niebla, ver un Ferrari, sea el que sea, provoca siempre una reacción, desde girar la cabeza, a proclamarlo a los cuatro vientos mientras sacar el teléfono para fotografiar o grabar, o todo en uno y, en el caso de las dos unidades de prueba o mulas de Ferrari avistadas a través de una intensa niebla, parecen haber sido filmadas durante el rodaje de una escena integrada en una película de misterio.
Sea como fuere, el extraño procedimiento de estos dos ejemplares nos hace entender que, las conduciones de humedad y temperatura ambiental que se vivía en las inmediaciones de la factoría de Maranello eran propicias para sacar a pasear estos dos coches y someterles a algún tipo de test en condiciones reales.
De hecho, lo que parece claro, habida cuenta de la descripción del artífice de la filmación, nuestro paparazzi de cabecera en la zona mítica de Módena, Varryx, es que, al menos una de ellas es una mula híbrida, la que viste una librea totalmente en blanco aunque si bien parece que, por sus retrovisores, estaría pintada en blanco, a pesar de los retrovisores distinguidos en Giallo mítico de Ferrari, luce en su capó una pegatina triangular de fondo también amarillo que bien podría ser la que anuncia y advierte de su constitución como vehículo electrificado.
En los casi 10 minutos de filmación, los dos Ferrari de test que recurre, según se intuye, recurren a la carrocería del Ferrari 488 GTB, se encuentran en lo que parece ser una vía pública de escaso o nulo tráfico, el primero de las dos mulas de Ferrari realiza unos trayectos en los que, según el sonido emitido, parece apagar el motor de combustión para circular en modo sigiloso, lo que hace suponer que circula recurriendo a la motricidad ajena al uso de gasolina, es decir, en modo eléctrico.
Posteriormente, transcurridos dos tercios del vídeo, aparece otro ejemplar de pruebas, éste enfundado en un vinilo de camuflaje más intenso, a la par que disruptivo realiza unas maniobras, aparentemente similares a las de su colega de faenas.
En función de lo que el bueno de Varryx anuncia, su apuesta es por la de que éste último prototipo de Ferrari se trata del propulsor V12 híbrido mientras que el primero podría tratarse, de nuevo, de uno de los coches utilizados en el desarrollo del motor V6 híbrido en el que la marca ha puesto tanto empeño.