Parecían la pareja eterna. Su relación profesional había resistido durante más de dos décadas e incluso había demostrado tener la solidez en los momentos personales más bajos de cada uno de ellos. Sin embargo, hoy, Sébastien Loeb y Daniel Elena separan sus caminos tras haber acumulado 79 victorias en el WRC, nueve títulos absolutos del Campeonato del Mundo y un triunfo en el Mundial S1600. A partir de aquí, el alsaciano pasará a contar con otro copiloto, mientras que el monegasco no ha aclarado cuáles serán sus siguientes pasos.
Este movimiento, el cual el propio Loeb ha asegurado que “no fue una decisión fácil de tomar”, ha llegado después de la insistencia por parte de Prodrive para que Sébastien contase con un nuevo navegante para este año de preparación para el Dakar 2022 en el que se espera que compita en algunas pruebas para seguir desarrollando del BRX Hunter T1. Desde la firma británica, responsables del proyecto Bahrain Raid Xtreme, no quedaron satisfechos con la labor de Elena durante el pasado mes de enero, por lo que tras las respectivas conversaciones con Loeb, se optó por comunicárselo al propio Daniel.
Seb me llamó un poco antes del mediodía del martes para decirme que iba a continuar su carrera con otro copiloto. Me dijo que era una solicitud de Prodrive, que descubrió que no me había involucrado lo suficiente y que había cometido demasiados errores de navegación durante el último Dakar – Daniel Elena
“OK me perdí durante la primera etapa porque estaba descubriendo cómo funciona la tableta digital que reemplazó al road-book de papel, pero no creo que cometí más errores de navegación que los demás”, asegura Daniel Elena en sus declaraciones. “Todavía logramos dos podios juntos en el evento y somos quizás los que más etapas hemos ganado de los cuatro Dakar en