Este año, el Porsche Boxster cumple 25 años y para celebrarlo la marca lanza una edición especial de solo 1.250 unidades que recupera los valores más interesantes del prototipo en el que se basó. Una versión que recupera el espíritu original del modelo. El añó 1996 llegó el Porsche Boxster y supuso una revolución en la marca. Los motivos que hicieron posible este coche son cosa de Horst Marchart, el entonces Director del Departamento de Desarrollo General de Vehículos.
La situación de la marca de Stuttgart era delicada en esos momentos y se necesitaba un buen revulsivo. El trabajo de Marchart fue pensar en una serie de innovaciones que cambiarían las características de los modelos de Porsche y que culminaron en un modelo cabrío que triunfó enseguida y que hoy disfruta de esta edición especial para los que quieren un modelo diferente y ya con una tradición bastante importante.
Una gama por debajo del 911 pero con toda su esencia
La propuesta del ejecutivo fue la creación de una gama de deportivos que estuviera por debajo del mítico Porsche 911, así que se puso manos a la obra y propuso varias soluciones. En aquella época, a principios de los años 90, estaba a punto de salir una variante del Porsche 911 de la versión 993. También estaban en el mercado las versiones 928, 944 y 968, todos muy distintos entre sí. El nuevo modelo tenía que mantener la esencia del 911 pero, al mismo tiempo, recuperar la esencia de los modelos Spyder.
Así que la idea de un modelo con motor central, con carrocería roadster biplaza, fue bien acogida. El nombre, Boxster, tenía un doble significado. Por un un lado, marca una referencia al roadster abierto y por otra, rinde homenaja al motor de seis cilindros propio de la marca. De esa propuesta también surgió la idea de que el motor sería refrigerado por agua. Tras su aplicación en el Boxster, este sistema se incorporó en el motor boxer del Porsche 911 de la versión 996.
El prototipo del Boxster estuvo listo para su presentación en el Salón de Detroit en 1993. Para darle forma, se había mirado hacia el Porsche 550 Spyder de los cincuenta y el Porsche 718 RS 60 de los sesenta. Entre sus características destacan el motor central, un largo voladizo delantero, uno trasero corto y salidas centrales de escape.
El modelo de producción
Después de la buena acogida del prototipo del Boxster, se preparó la versión de producción. Era muy similar a la versión previa. Incluía la refrigeración del motor por agua, pinzas de freno de cuatro pistones de aleación ligera en estructura monobloque procedentes de la competición, tecnología de cuatro válvulas y el sistema VarioCam.
El motor de seis cilindros se estrenó en el Boxster y desde este pasó a futuras generaciones del 911. El cambio de cinco velocidades se podía sustituir por un cambio automático Triptonic S, también de cinco marchas. Desde entonces, ha disfrutado de varias modificaciones en los años 2003, 2005, 2007 y 2012.
En el año 2016 llegó la última renovación de la gama, la 716, que mejoró considerablemente el modelo. Estas novedades se han aplicado a la edición 25 aniversario. La prueba es que el primer Porsche Boxster ofrecía 204 CV, la edición especial alcanza los 400 CV. Un homenaje más que justificado para un modelo mítico de la marca.