Cuando el Grupo Volkswagen decidió escindir a Cupra del seno de Seat nos llevamos una alegría. La división deportiva de la casa española cobraba entidad propia y pasaba a engrosar el listado de firmas premium. El problema es que, hasta crear una gama completamente nueva e independiente, seguiría nutriéndose de modelos firmados por la casa de Martorell. El primero de esta nueva era es el Formentor, aunque el Cupra Born lo cambiará todo.
Sí, porque el Cupra Born nació bajo Seat y tenía por nombre el-Born. El caso es que, dejando a un lado este cambio de marca y nombre, el modelo que han presentado sigue fiel al concepto que debutó hace ya un par de años. Si estás buscando un modelo eléctrico de corte deportivo que no sea un SUV, este coche es para ti. Amén de que ofrece un diseño que para sí quisieran muchos de sus actuales y futuros rivales. Te contamos sus secretos…
renderAd(,44162);
El Cupra Born, aunque lo disimule muy bien, es casi un «calco» del Volkswagen ID.3
Podríamos definirlo como audaz o atrevido, pero el Born es una mezcla de muchas cosas. Destaca sobre todo por su afilado frontal o las ópticas con tecnología Full LED que lo presiden. Su formato es muy rasgado y atractivo. El logo y grafías Cupra, en tono cobre, preside la zona baja del capó y extiende su influencia en la pequeña parrilla. Tampoco podemos obviar la gran toma de aire inferior (carenada en parte) rematada por un splitter en cobre.
Si nos fijamos en el lateral veremos que es casi un calco del Volkswagen ID.3. Salvando las distancias, diríamos que el techo y las puertas son las mismas, aunque con matices. Esto se ve en la forma y acabado de las taloneras. El pilar «C» también ve alterado su diseño, aunque en esencia se