Técnicamente. En verdad, es un patinete eléctrico. El estado actual de Lancia es una verdadera pena, y es una sombra de la grandeza que tuvo esta marca italiana hace décadas, envidiada por muchos fabricantes europeos. Su actual gama de productos se compone por el veterano Lancia Ypsilon, que languidece, solamente a la venta en el mercado italiano. Por fortuna, Lancia pronto volverá a producir nuevos productos y tiene un gran diseñador al mando. Hasta entonces, Lancia nos presenta su primer vehículo nuevo en mucho tiempo.
El vehículo en cuestión es un VMP, un vehículo de movilidad personal. Un patinete eléctrico llamado Lancia Ypsilon e-scooter. Esta estrategia no es nueva en la industria del automóvil. Multitud de marcas venden patinetes eléctricos bajo su propio paraguas comercial, con un branding específico. Estos patinentes no son fabricados por las marcas de coches, son fabricados en el lejano oriente por un tercero, y son ligeramente personalizados a nivel estético. Son una fuente de margen de beneficios para su red comercial.
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Muchas marcas de coches venden patinetes eléctricos fabricados por un tercero.
Personalmente, no soy usuario de VMP y no me solucionarían mis retos de movilidad, pero no puedo ignorar su pujanza en grandes ciudades como Madrid o Barcelona, donde proliferan fuertemente – ya sean patinetes privados o flotas compartidas. El Ypsilon e-scooter está fabricado en aluminio para poner su peso a raya y se ofrece en colores Maryne y Gold. Cuenta con un faro LED en la parte superior del manillar y una pequeña luz trasera junto a la rueda. Tiene 250 watios de potencia y su propulsión es a la rueda trasera.
Sus ruedas no llevan neumáticos con cámara, son neumáticos