En Manthey pueden estar orgullosos. La empresa Manthey Racing GmbH, con sede en Meuspath, muy cerca de Nürburgring, se fundó en 1996. Y desde entonces colabora con Porsche. Entre otras cosas, es la responsable de poner en pista los Porsche 911 RSR en el Campeonato del Mundo de Resistencia (WEC). En 2013, Porsche AG adquirió el 51% del accionariado de la compañía, que cuenta actualmente con unos 200 empleados.
Ahora, para celebrar el 25 aniversario de la creación de Manthey, Porsche anuncia una edición del 911 GT2 RS muy especial. Se trata del Porsche 911 GT2 RS Clubsport 25, del que solo se van a fabricar 30 unidades, con un precio desde 525.000 euros sin impuestos. Las entregas comenzarán en 2022.
Motor bóxer 3.8 biturbo de 700 CV
La base de partida para este 911 tan exclusivo es el 911 GT2 RS Clubsport, equipado con el motor 3.8 boxer con sobrealimentación por doble turbocompresor, que transmite sus 700 CV a las ruedas traseras a través del cambio PDK de doble embrague.
La versión 911 GT2 RS Clubsport 25 se diferencia principalmente por una serie de componentes procedentes de los Porsche de competición, sobre todo en lo referido a tecnología y aerodinámica. Y la fuente de inspiración no podía ser otro que el 911 GT3 R de Manthey, conocido entre los aficionados a las carreras –especialmente en Nürburgring– y a la marca alemana como “Grello” (green + yellow) por su llamativa decoración en verde y amarillo.
Los elementos que Manthey ha integrado en la carrocería de este 911 GT3 RS Clubsport 25, avalados por su experiencia en competición, se une el toque de Grant Larson, de Porsche Style, responsable del poderoso aspecto de los 911 RSR, 911 GT3 R o el 935, entre otros.
Concebido para romper el crono en circuito
Basado en el Porsche 911 de la serie 991, uno de los rasgos técnicos característicos del GT 2 RS Clubsport 25 es la reposición del radiador, que se coloca de forma central para optimizar el flujo de aire de refrigeración y mantener así el motor en un rango estable de temperatura . Esto obliga a rediseñar por completo el frontal, con el objetivo de aumentar la carga aerodinámica en el eje delantero.
Al igual que en el 911 GT3 R, dos grandes entradas, independientes de la toma central de refrigeración del motor, se encargan de canalizar el aire hacia la parte trasera. En el capó, por encima del emblema de la marca, una toma NACA suministra aire fresco al habitáculo.
Las suspensiones del 911 GT2 RS Clubsport 25 toman muchos elementos del Porshe 935, del que también se toman “prestadas” el sistema de control electrónico de la dirección o las espectaculares llantas de 18 pulgadas con tuerca central.
En la zaga se utiliza un enorme alerón sobre soportes tipo “cuello de cisne”. Manthey añade tomas de ventilación bajo la luneta para mejorar la circulación de aire en el vano motor, además de modificar el difusor que integra el nuevo sistema de escape. En cuanto a los faros, otra de las señas de identidad del 911 GT2 RS Clubsport, también se han desarrollado de forma específca para este modelo. Integran los intermitentes, y recuerdan con sus cuatro franjas a los del Porsche 911 RSR ganador en Le Mans.
El interior es el del 911 GT2 RS Clubsport, incluyendo la jaula de seguridad según la normativa de la FIA.