Kalle Ronvaperä va a ser una estrella del Campeonato del Mundo de Rallyes. El piloto finlandés, que ya se convirtió en el más joven de la historia en ganar una prueba del mundial, se ha apuntado el segundo triunfo de su trayectoria. Ha sido en el Rally Acrópolis y demostrando una superioridad impactante.
Rovanperä voló durante toda la jornada del sábado dejando en nada los ataques de los dos últimos campeones del mundo, Ott Tänak y Sébastien Ogier. Este domingo solo se ha tenido que dedicar a administrar la ventaja para superar las victorias de su padre, Harri Rovanperä, con solo 20 años de edad. Increíble.
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Rovanperä le ha metido más de medio minuto a Tänak gracias a una jornada de sábado en la que fue letal y aplastó a sus rivales tramo a tramo. En Toyota pueden estar tranquilos, porque cuando Ogier cuelgue el casco, al menos el del WRC, a final de temporada tienen un sucesor que mantendrá el nivel.
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