Salirse de la estatura media de la población puede ser un problema a la hora de comprar coche, y es que ser demasiado alto o bajo puede suponer eliminar muchos coches de tu lista de favoritos. Por esta razón, Consumer Reports nos trae un estudio bastante curioso donde ha analizado el mercado automovilístico en busca de los mejores coches en función de la capacidad para adaptarse a cualquier estatura.
Para entender la base de este estudio de Consumer Reports, lo primero que debemos entender es el cómo las marcas diseñan los interiores de sus coches, y más concretamente los puestos de conducción, la visibilidad o el acceso a cada una de las plazas. Un fabricante de coches siempre intenta llegar al mayor público posible, y es por ello por lo que el diseño de cada aspecto se realiza tomando como referencia unas medidas y proporciones medias a nivel global.
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El puesto de conducción de un coche se diseña pensando en unas porporciones medias globales, por lo que si nos salimos de ahí podemos tener un problema
Según el cliente objetivo de ese modelo, esas cotas se adaptan, pues el cliente de un deportivo no es el mismo que el de un coche familiar, pero la máxima del fabricante es siempre conseguir llegar a la mayor cantidad de personas posibles. En estas medidas básicas, además se añaden márgenes más o menos extensos gracias a la regulación de la columna de dirección o el asiento, pero los límites se imponen en función del espacio disponible en el habitáculo y el diseño del propio coche.
Y es por esta razón por lo que Consumer Reports ha realizado un estudio centrado en el mercado norteamericano, donde se analiza el puesto de conducción, el acceso o la visibilidad para estaturas de 1,56 a 1,89