«Parar la propaganda de los asesinos del cima». Este es el principal objetivo de una nueva Iniciativa Ciudadana Europea, aprobada por la Comisión Europea e impulsada por 20 asociaciones, que pretende impulsar una ley europea que prohíba la publicidad de cualquier empresa que opere en el mercado de los combustibles fósiles o haga uso de ellos.
Esto incluiría la publicidad de los coches gasolina y diésel, de los barcos o de los aviones.
Y también el patrocinio
En concreto, la iniciativa pide que se prohíba tanto la publicidad como el patrocinio:
La publicidad de los combustibles fósiles y de los servicios de transporte aéreo, por carretera y por vías navegables (exceptuando los servicios de transporte de interés económico general) que utilicen combustibles fósiles.
La publicidad de cualquier empresa que opere en el mercado de los combustibles fósiles, en particular en el ámbito de la extracción, el refinado, el suministro, la distribución o la venta de combustibles fósiles.
El patrocinio por parte de las empresas a que se hace referencia en el punto anterior o la utilización de marcas comerciales o denominaciones comerciales utilizadas para los combustibles fósiles.
No se trata de algo totalmente descabellado si miramos, por ejemplo, a Ámsterdam: en junio se convirtió en la primera ciudad en aprobar una ley que prohíbe los anuncios de las empresas de combustibles fósiles y de aviación en los espacios públicos tras una petición ciudadana similar.
Cabeceras como la británica The Guardian también se han unido al