Ford presenta el restyling de su modelo compacto, el Ford Focus. La marca del óvalo azul actualiza uno de sus coches más importantes para el mercado europeo, que a decir verdad en los últimos años no está teniendo el éxito que sí lograba anteriormente. Entre otras cosas, por supuesto, porque los modelos SUV siguen robando ventas a los compactos tradicionales.
Sea como fuere, este actualizado Ford Focus aterriza con cambios estéticos, mejoras tecnológicas, nuevas mecánicas más eficientes y un completo equipamiento en materia de seguridad y asistentes a la conducción. Sus rivales son los de toda la vida, entre los que podemos citar los Seat León, Volkswagen Golf, Opel Astra, Renault Mégane, Toyota Corolla o Peugeot 308.
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Actualizaciones en su diseño y varios acabados para el Ford Focus
Llega aire fresco al nuevo Focus de la mano de variaciones visuales en su frontal, como la actualizada parrilla con el logo de la marca, faros revisados con nueva firma lumínica de LED y paragolpes de nueva factura. Además, cabe destacar que los acabados Connected, Titanium, ST-Line y Active aportan notables diferencias entre sí tanto en equipamiento como en estética.
Por su parte, los principales cambios de la parte trasera se centran en los pilotos de LED, que ahora tienen una carcasa más oscurecida para incrementar su deportividad visual, así como una leve variación en su firma luminosa.
Mientras que el acabado ST-Line aporta un estilo más deportivo heredado de Ford Performance, con paragolpes, parrilla, llantas, faldones y difusor agresivos, el Titanium busca una imagen más elegante y el Vignale, que es la más lujosa, equipada y confortable. A ello hay que añadir el acabado Active, con un aspecto más robusto y campero.
Si pasamos al habitáculo vemos claramente una mayor tecnología. Esta impresión llega de la mano de un cuadro de instrumentos totalmente digital, así como de