El primer coche eléctrico de CUPRA ya ha pasado por nuestras manos, y por ello hoy te traemos nuestro primer análisis del CUPRA Born. Son muchos los interrogantes alrededor de este coche eléctrico, un modelo que pretende convencer a muchos reacios a esta tecnología. Sin embargo, a lo largo de esta prueba vamos a responder a las dos dudas más importantes sobre este CUPRA Born, que son: ¿es el Born mejor compra que un Volkswagen ID.3? ¿es el Born un buen compacto deportivo?
Así es el diseño del CUPRA Born
Lo primero que debemos tener claro que es que este Cupra Born está basado en la plataforma modular MEB del grupo Volkswagen, y es por ello por lo que guarda un gran parecido con el Volkswagen ID.3 tanto en el exterior como en el interior.
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Hablamos de un coche compacto que mide 4.322 mm de largo (61 mm más que el ID.3) y que, frente a esa imagen más desenfadada y simpática que defiende el ID.3, luce un diseño más agresivo y deportivo tanto en el frontal como en la zaga. Con ello, CUPRA pretende diferenciarse y convencernos de que crear un eléctrico más deportivo es posible, aunque se comparta la misma base y esas proporciones que nos recuerdan tanto a un vehículo monovolumen.
Del Born solo se comercializará una única carrocería, con 5 puertas y una silueta Hatchback. Por lo tanto, no hay posibilidad de acceder a una carrocería familiar como por ejemplo sí ofrece un León.
Si me pedís mi opinión, para mí el diseño exterior de este Cupra Born está más logrado que el de su hermano ID.3. Es más atractivo, tiene más carácter y sí, se reconoce como un coche más deportivo. Eso sí, un plus de diferenciación tampoco le habría sentado mal para subrayar