Ya os hablamos de los futuros planes de Lexus a través de Lexus Electrified, que contempla lanzar al mercado un SUV, una berlina y un deportivo de altas prestaciones, todos ellos de propulsión cien por cien eléctrica. En concreto, las primeras imágenes del nuevo supercoche, al que podemos considerar el sucesor del Lexus LFA, se desvelaron el pasado mes de diciembre de 2021, cuando el presidente de Toyota y Lexus anunció la estrategia que llevará a la compañía a contar con una completa gama cien por cien eléctrica para 2030.
Ahora, Lexus desvela más imágenes de su futuro deportivo eléctrico, en las que se le puede contemplar desde un ángulo que no habíamos visto: la zaga. Aunque en realidad, se trata de imágenes generadas por ordenador, no del coche real. Hay que tener en cuenta que hablamos de un modelo que, previsiblemente, no estaría en el mercado hasta dentro de 8 años.
La primera sensación que produce es la de un diseño muy vanguardista, mucho más sofisticado que el frontal, al que se le pueden encontrar algunas reminiscencias con otros modelos de la marca, destacando la gran caída del techo en la parte posterior. Y poco más, porque en Lexus quieren mantener la intriga y parece que van a desvelar la información con cuentagotas. Ni siquiera podemos ver cómo quedaría la afilada silueta del Lexus eléctrico con lo que parece un alerón trasero integrado que se desplegará con la velocidad, o alguna imagen sobre el interior.
Baterías de estado sólido y hasta 700 km de autonomía
Sin embargo, hay un dato que Lexus proporciona en esta nueva entrega de información que nos parece muy relevante. Mucho más que las prestaciones, pues se habla de una aceleración de 0 a 100 km/h «en el rango de los dos segundos», algo que, hoy por hoy, no es nada difícil cuando se habla de supercoches eléctricos. Y nos referimos a la autonomía. Porque a estas alturas, atreverse a anunciar más de 700 km de autonomía en un coche de este tipo solo es posible si tienes un as guardado bajo la manga. En Toyota y Lexus parece que lo tienen, con las baterías de estado sólido. No confirman si estarán listas para cuando el nuevo deportivo de Lexus llegue al mercado, pero al menos lo dan como posible.
Lexus también deja caer que este nuevo coche ofrecerá una experiencia de conducción única, «con una conexión perfecta de desaceleración, dirección y aceleración en todo momento». Sus proporciones, con un bajo centro de gravedad y un puesto de conducción muy retrasado, invitan a pensar en ello. Pero seguro que la marca japonesa se guarda alguna sorpresa para gestionar la forma de entregar la potencia y el par que tienen los motores eléctricos. Esperaremos impacientes a la siguiente entrega.
