La marca Mercedes ha impulsado con notoriedad sus aspiraciones en la electrificación de sus modelos. A día de hoy, prácticamente todas las versiones térmicas tienen una cien por cien eléctrica, algo que le convierte en uno de los fabricantes de coches con mayor gama de modelos totalmente eléctricos.
En la prueba de hoy estaremos con su EQ tope de gama, el EQS. Se trata de un modelo del segmento F con 5,21 metros de largo, calidades al máximo nivel y con la última tecnología disponible. El EQS se podría decir que es la versión eléctrica del ya conocido Mercedes Clase S.
Diseño exterior muy aerodinámico
Comenzando a hablar del diseño exterior del Mercedes EQS, destaca un diseño que a simple vista resalta su gran aerodinámica. Tiene líneas muy suaves provocando una estética muy elegante.
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En la zona frontal, resalta un grupo óptico full LED con faros MultiBeam LED que quedan unidos entre sí por una línea que se ilumina, algo común en el resto de la gama EQ. La parrilla delantera sigue contando con los logos de Mercedes pero sin entrada de aire, ya que los modelos eléctricos no tienen la necesidad de incorporarla en ese lugar.
Ya en el lateral, podemos destacar esa aerodinámica que destaca tanto al EQS, es una auténtica maravilla como se ve de perfil este coche. Uno de los elementos curiosos de este coche, es la maneta de las puerta que se queda escondida, las llantas muy aerodinámicas también en 21 pulgadas con medida 275 en perfil 40 y la caída estilo coupé en la zona trasera.
Finalizando con la zaga, podemos ver un llamativo grupo óptico que es el mismo que utiliza su hermano el Clase S, aunque en esta ocasión el EQS lo une entre sí por una franja roja que se ilumina, un difusor que le da un