A estas alturas, la historia del Mercedes-Benz Clase G ya es todo un caso práctico de cómo un producto que prácticamente fue concebido como una herramienta rodante ha terminado convirtiéndose en un objeto de deseo, con su bestial variante AMG G 63 como punta de lanza.
Pero para quienes este último todavía les parece poco (que los hay, especialmente entre las ‘celebrities’), el preparador Brabus presenta ahora su nueva interpretación de este modelo. Su nombre es ‘G900 Superblack’ y, por los más de 400.000 euros que cuesta, promete exactamente eso que su etiqueta dice: más de 900 CV de potencia y el predominio del color negro.
Tan rápido como oscuro, o casi
Para dar vida al Brabus G900 Superblack, la firma de Bottrop comienza por el ‘corazón’. Tomando como punto de partida el 4.0 V8 biturbo de AMG, se aumenta el diámetro de los cilindros hasta 84 mm. La operación continúa con nuevos pistones y bielas forjados, asentados sobre un cigüeñal que alarga la carrera de los mismos hasta los 100 mm. Con estas modificaciones, el cubicaje pasa a ser de 4,5 litros.
La aspiración cambia también por completo, sustituyendo los dos turbos originales por otros con compresores más grandes y ejes reforzados, lo cual permite subir la presión de sobrealimentación hasta 1,4 bares. Asimismo, dos válvulas de descarga se ocupan de aliviar cualquier posible sobrepresión, emitiendo un elocuente sonido (o así lo asegura Brabus) al soltar el acelerador.