Con el paso de los años, el coche va acumulando varios problemas que derivan del uso del mismo. A medida que se recorren los kilómetros y se usa de manera habitual, hay elementos que se desgastan y que pese al mantenimiento correcto, hay que cambiar. Pero hay otras cosas que pueden surgir y que no seamos conscientes. Los malos olores en el habitáculo pueden aparecer incluso cuando se realiza una limpieza habitual.
Un trocito de comida que ha caído en los asientos y no se ha retirado (algo muy común cuando los viajan en el coche), restos que se ponen bajo ellos y que no se ven y mucha más cosas que acaban provocando que el interior del vehículo huela mal. Sabemos cómo evitar que esos olores se produzcan, pero los descuidos también son comunes, así que vamos a contarte cómo eliminarlos una vez se ha producido.
Limpieza en profundidad
Es importante mantener una limpieza continua del habitáculo. Pasar el paño y retirar el polvo, limpiar la tapicería para evitar la acumulación de sudor y otras sustancias que generan ese mal olor y aspirar las alfombrillas es algo que se suele hacer a menudo y ayuda a evitar que haya malos olores. Pero también hay que hacer una buena limpieza general y limpiar bajo los asientos y otros lugares de difícil acceso.
Así se evita que quede nada «perdido» que pueda generar esos malos olores sin que podamos evitarlo.
Ventilar bien el vehículo
Esta es la primera medida que hay que tomar siempre. Dejando las ventanillas abiertas un rato cada día, se evita que el calor y el aire encerrado dentro del habitáculo produzcan malos olores. Esto es una medida que limpia el aire del interior, pero si hay algún elemento que provoca este mal olor, hay que limpiarlo, así que la limpieza general periódica es fundamental.
Cambiar el flitro del habitáculo
El filtro del habitáculo o de polen se encarga de evitar que este elemento pase al aire del interior. Pero cuando se acumula mucha suciedad en el mismo, se puede generar moho. Este genera un desagradable olor que no solo resulta incómodo, sino que puede conllevar problemas para los ocupantes del vehículo.
Limpiar el circuito del aire acondicionado
La humedad acumulada en el circuito del aire acondicionado puede ser responsable de que surjan malos olores. Hay productos que se utilizan para ello, aunque es un proceso que se realiza también en el taller. De todas maneras, se puede solucionar, al menos en parte, acivando la calefacción con el aire acondicionado conectado. Si se deja funcionar durante unos cinco minutos con el máximo caudal de aire, se puede eliminar la humedad del circuito. Siempre es mejor dejar que lo haga un profesional, pero puede ayudar a mantener limpio este circuito que tanto se utiliza en verano.
Uso de ambientadores
No hay nada malo en utilizar ambientadores. Ofrecen un agradable olor, fresco e intenso, pero hay que recordar que solo enmascaran el olor, sin eliminarlo. Así que aunque se use uno de estos ambientadores, hay que mantener la costumbre de realizar la limpieza general del coche y vigilar todas las posibles fuentes de malos olores.