Que el Seat León sea uno de los coches más vendidos de nuestro mercado no es de extrañar, ya que su relación calidad/precio lo convierte en una opción muy interesante. Sin duda, a pesar de la era SUV que estamos viviendo, el Seat León Sportstourer, sigue estando en la lista de recomendaciones por su bajo consumo y espacio interior.
En la prueba de hoy, estaremos con el León Sportstourer diésel de 115 CV y caja de cambios manual de seis relaciones, así que veremos si esta motorización es recomendable para un uso familiar. El acabado es el más sencillo, el Style, aunque con varios extras como el techo solar, asiento del conductor con reglaje eléctrico o portón del maletero automático.
Un diseño elegante y atractivo a la vista
Si hablamos del diseño del Seat León Sportstourer, podemos mencionar un diseño sin tanta agresividad, es más tradicional, que no disgusta a nadie. A pesar de eso, sí cuenta con varios detalles estéticos que le dan un aspecto más actualizado, algo muy importante en estos tiempos que corren.
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En la parte frontal, resalta principalmente un grupo óptico full LED que ya conocemos en el resto del grupo, una parrilla delantera en negro con molduras en color cromado y un parachoques con unas inserciones aerodinámicas que lo hacen muy agraciado a la vista.
Continuando hacia el lateral, podemos destacar unas llantas en 17 pulgadas con medida 225 en perfil 45, un nervio en la cintura que lo recorre de punta a punta y unas barras de techo en color cromado a juego con las molduras de las puertas.
Finalizando con la zaga, observamos unos pilotos full LED opcionales en este acabado, que quedan unidos entre sí por una franja roja que se ilumina, la denominación del modelo manuscrita y un difusor trasero en color negro.
Interior minimalista pero tecnológico
Si pasamos