Los grandes coches tienen un gran final. El Bugatti Chiron está a punto de desaparecer y quiere hacerlo a lo grande. Ya hemos visto como se han lanzado al mercado varias ediciones especiales con pocas unidades y ahora, para poner punto y final a la producción del superdeportivo, se ha querido rendir homenaje a la hija de Ettore Bugatti.
No es una figura muy conocida a nivel público, pero sí que es importante para la marca. Estuvo muy unida a su padre y en el año 1967 escribió el libro La historia de Bugatti, repasando toda la trayectoria de la marca. Para ofrecer ese merecido homenaje, la marca ha preparado tres unidades de Chiron con un vestido especial.
Un merecido homenaje
El Bugatti Chiron L’Ébé tiene como base de su diseño el Bugatti Type 57 G Tank, que ganó en las 24 horas de Le Mans en 1937. El color externo es un azul oscuro, que cubre la carrocería de fibra de carbono. Para darle ese toque modernista que le gustaba a la hija del fundador de la marca, se han añadido toques decorativos en color dorado. Hay una insignia con la inscripción EB, también en dorado. También está ese color en la parrilla delantera y las insignias W16 y 1.500.Estas certifican la presencia del motor W16 de 8.0 litros.
Las llantas también reciben este color dorado, dándole un toque muy elegante. El logotipo EB está presente en la parte trasera, en la base del alerón retráctil y bordado en los reposacabezas de los asientos. En el interior se puede encontrar una gran presencia de fibra de carbono, teñida de azul.
El panel de la puerta del conductor está cubierto por piel Silk con motivos azules, que sirve como identificador de esta variante. Por su parte, el panel de la puerta del acompañante invierte el patrón, para crear un juego visual muy interesante. Hay varios elementos exclusivos para esta versión, lo que demuestra la capacidad de adaptación de Bugatti.
Con estas tres unidades, dos Chiron y un Chiron Sport, se da por finalizada la producció de este superdeportivo, que irrumpió en el mercado en el año 2016.