El segmento de los muscle cars está compuesto por tres miembros que luchan con fiereza. Todo el mundo cree que el creador fue el Ford Mustang, pero no, no es así. El que abrió la «veda» fue el Pontiac GTO pero quien se llevó todo el protagonismo fue el modelo del Blue Oval. Y ya, para subir nota, te diremos que el Plymouth Barracuda nació el 1 de abril de 1964, dos semanas antes que el Mustang. Por tanto, «unos crían la fama y otros cardan la lana» ¿No?
Hoy día los Mustang, Camaro y Challenger sobreviven como pueden y de ahí que cada marca de pasos para que no mueran de indiferencia. El camino de las versiones especiales es el más empleado, pero Stellantis ha querido dar un golpe de efecto con su pony car. Ha dado luz verde para que el Dodge Challenger Convertible no sea solo un sueño al alcance de un puñado de clientes privilegiados. ¿Sabes cómo lo van a hacer? Pues toma nota de la jugada…
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El Dodge Challenger Convertible es una creación del carrocero Drop Top Customs…
Como sabes, el Dodge Challenger Convertible no forma parte del catálogo de la firma yanqui. La versión coupé es la que fabrican y venden desde hace muchos años, pero no una sin techo. Sin embargo, los Ford Mustang y Chevrolet Camaro sí que cuentan en sus respectivas gamas con carrocerías convertibles. Pues bien, para evitar que el grueso de los clientes se vayan a ambas opciones, Stellantis ha llegado a un acuerdo con un carrocero muy conocido.
Se trata de Drop Top Customs, el carrocero de vehículos cabrio más antiguo de los Estados Unidos. Sin embargo, para hacerse con un Challenger Convertible el proceso no es fácil ni rápido ni barato. Sí, porque si quieres uno primero tendrás que ir a