Las carreteras y las calles de las ciudades cuentan con muchas señales que ayudan a regular el tráfico. Las podemos encontrar en muchos lugares y nos indican cosas como si podemos circular por esas vías, si hay que parar antes de cruzar una intersección, si hay que ceder el paso o incluso la velocidad máxima a la que podemos circular. Pero hay varios tipos de estas señales, algunas veces en el mismo lugar y puede suceder que haya dos señales que se contradigan entre sí. Entonces, ¿cuál es la que prevalece sobre la otra?
Por suerte, hay un orden de prioridad de estas señales, así que podemos saber cuál es la que tiene vigencia y cuál es la que ha sido sustituída por ella. Se trata de un orden que viene establecido por ley, así que está determinado con una norma que se ha de conocer y obedecer. Vamos a verlo.
Orden de prioridad de las señales de tráfico
Las señales de tráfico pueden ser las que marquen los agentes de tráfico durante sus funciones de control del tráfico; las señales circunstanciales o de balizamiento fijo; los semáforos; las señales verticales, que están sobre postes o pórticos y las señales horizontales, que son las que se pintan sobre la calzada.
Este es, en realidad, el orden en el que se han de atender a las señales de tráfico. Las señales y requerimientos de los agentes de tráfico tienen prevalencia sobre todas las demás. Ante cualquier señalización del agente, se ha de atender a lo que ordena. Y esto es importante, ya que ignorar una orden de un agente puede conllevar una multa de 200 euros y la pérdida de cuatro puntos del carnet.
Las señales provisionales, por obras, la señalización de un accidente o cualquier otro motivo, son las que siguen a estas en importancia. Son de carácter temporal y marcan unas características de uso provisionales. El resto de señales vienen detrás, con la prevalencia de los semáforos, que se sitúan por delante de las marcas verticales y las horizontales.