El Grupo BMW está persiguiendo sus objetivos climáticos para la red de proveedores y reduciendo significativamente la huella de carbono de su abastecimiento de acero. Tras los primeros contratos con proveedores europeos, BMW ha cerrado ahora otros acuerdos para el suministro de acero con reducción de CO2 en Estados Unidos y China.
Joachim Post, miembro del Consejo de Administración de BMW AG responsable de la Red de Compras y Proveedores, ha apuntado que «el acero es una de las principales fuentes de emisiones de CO2 en nuestra cadena de suministro. Por eso estamos reorganizando exhaustivamente nuestra oferta de acero, para poder suministrar a nuestra red de producción global más de un tercio de acero reducido en CO2 a partir de 2026. Esto reducirá la huella de carbono de nuestra cadena de suministro en 900.000 toneladas al año, al tiempo que impulsará la transformación de la industria del acero».
A medio plazo, el Grupo BMW aumentará el ahorro de CO2 mediante acuerdos con otros proveedores de acero y, de este modo, impulsará de forma consecuente la descarbonización de su red de proveedores. Alrededor del 20% de las emisiones de CO2 de la cadena de suministro de un vehículo medio totalmente eléctrico son atribuibles al acero, que ocupa el tercer lugar, después de las células de la batería y el aluminio. Con sus versátiles propiedades, el acero es, sin embargo, uno de los materiales clave para la fabricación de automóviles y no será menos importante para los futuros conceptos y generaciones de vehículos.
Acero con reducción de CO2
El grupo bávaro ha firmado un acuerdo con Salzgitter AG para el suministro de acero con menos emisiones de CO2. El plan es utilizar el acero en la producción en serie de automóviles en las plantas europeas del Grupo BMW a partir de 2026. El Grupo BMW ya firmó un acuerdo con la empresa sueca H2 Green Steel en octubre del año pasado. La empresa suministrará a las plantas europeas del Grupo BMW acero producido exclusivamente con hidrógeno y electricidad procedente de energías renovables a partir de 2025.
El objetivo es que el acero de producción reducida en CO2 cubra el 40% de la demanda en sus plantas europeas para 2030, reduciendo así las emisiones de CO2 hasta en 400.000 toneladas al año.
El Grupo BMW también ha establecido una circularidad sostenible de materiales para los residuos de chapa de acero con varios proveedores de acero. Cuando entregan bobinas de acero a las plantas, los fabricantes se llevan los restos de acero, como los que se producen en las plantas de prensado cuando se perforan las puertas, y utilizan este material para producir acero nuevo. Este acero se devuelve a las plantas del Grupo BMW. De este modo, las materias primas pueden utilizarse varias veces en una economía circular, conservando así los recursos naturales.