Las alianzas entre marcas se han convertido en una de las grandes bazas para conseguir avanzar en materia de movilidad eléctrica. A principios de año conocíamos que Mercedes, una de las marcas más reconocidas no solo a nivel europeo, sino también en todo el mundo, se unía a la recién aparecida Rivian para fabricar furgonetas eléctricas en el mercado europeo.
Esta semana nos ha sorprendido la noticia de que esa alianza estratégica se ha roto, al menos de momento. El CEO de la compañía estadounidense, RJ Scaringe, ha declarado que Rivian pone en pausa la colaboración con la empresa alemana. La excusa que ha puesto es la necesidad de rentabilizar todas las inversiones realizadas por Rivian, con acciones que aporten valor a la empresa.
En otras palabras: Rivian seguirá apostando por su actual línea de negocio, a la que tiene que dirigir toda su atención y recursos para que sea rentable. Con este paso atrás, la compañía quiere reforzar su línea actual y buscar la rentabilidad a corto plazo, sin hipotecar una considerable cantidad de recursos económicos en un proyecto que no cuajará hasta dentro de unos años.
En cualquier caso, desde Rivian no cierran las puertas a futuras colaboraciones entre ambas compañías en un futuro próximo. Esto podría ser cuando los estadounidenses hayan conseguido una rentabilidad de sus negocios actuales.
Rivian ha comenzado a distribuir las primeras unidades de furgonetas eléctricas a Amazon, que las pondrá en servicio de manera escalada en varias ciudades.
El acuerdo Rivian-Mercedes
Las dos compañías rubricaron este acuerdo con la intención de comenzar a fabricar furgonetas eléctricas para el mercado europeo. Estas iban a ser producidas en una planta que se iba a instalar en Polonia, Hungría o Rumanía. Las primera unidades saldrían de la línea de montaje en unos pocos años, una situación que podría haber llevado a Rivian a abandonar el acuerdo.
Las furgonetas iban a ser producidas sobre la base de la plataforma VAN.EA de Mercedes-Benz, y con la plataforma RLV (Rivian Light Van) de la marca americana.
Mercedes, por su parte, asegura que respeta la decisión de su asociado. También dice que esta situación no va a afectar el desarrollo de los planes de electrificación de la marca, así que las furgonetas eléctricas planificadas, al menos bajo su plataforma, llegarán pronto.