Tesla no empieza 2023 con el pie derecho, pues pese a haber batido su propio récord de ventas al cierre de 2022 y ser líder de ventas en mercados como el nuestro no ha conseguido alcanzar sus objetivos. Ante el descontento de los inversores, las acciones de la compañía valen hoy 113,64 dólares frente a los más de 380 que valían hace un año.
Los problemas crecen para un Elon Musk que en los últimos doce meses no solo ha visto cómo su empresa perdía más de dos tercios de su valor, sino que ha sido destronado como hombre más rico del mundo tras dilapidar una fortuna de 124.000 millones. Gran parte de culpa (pero no toda) la tiene su loco ‘affaire’ con Twitter.
Cómo hundir a Twitter y a Tesla en tiempo récord
En la presentación de resultados anuales de Tesla, la compañía acaba de anunciar que solo en el último cuatrimestre de 2022, produjo 439.701 vehículos y entregó 405.278 (de los cuales, la gran mayoría han sido Model 3 y Model Y).
En todo 2022 las entregas subieron un 40 % interanual hasta llegar a los 1,31 millones de coches, mientras que la producción creció un 47 % respecto a 2021, llegando a 1,37 millones. Pese a que a priori no parecen malas cifras para los tiempos que corren (y de hecho son todo un récord para la marca), se quedan lejos de las expectativas de la firma, y sobre todo, de sus inversores.