Muchos son los mitos y medias verdades que rodean los coches eléctricos. Son un producto nuevo al que todavía cuesta adaptarse y conocer sus particularidades de uso.
Por ejemplo, un eléctrico gasta más en carretera que en ciudad, mientras que en un coche gasolina es la inversa. El frío tiene un débil incidencia en un coche gasolina o diésel, pero sí afecta mucho a los eléctricos. Pero, ¿hasta qué punto? ¿Es posible perder más del 50 % de autonomía por culpa del frío? ¿Se puede realmente utilizar un coche eléctrico en invierno o con frío intenso?
En un país cuyo parque móvil de turismos está compuesto en torno a un 20 % de coches eléctricos y con frío intenso en invierno, Noruega es un excelente laboratorio para averiguar hasta qué punto un eléctrico pierde autonomía en condiciones invernales.
En Motorpasión
Hasta 1.000 kg de diferencia: el brutal y peligroso sobrepeso que te llevas al comprar un coche eléctrico en vez de su versión de gasolina
La gente de Motor.no ha efectuado una mega comparativa con varios de los coches eléctricos en venta en Noruega, incluidos una docena de modelos chinos, para averiguar qué coche tiene la mejor autonomía con temperaturas que ronda los -10º C. Spoiler alert: el ganador es un Tesla Model S.
A lo largo de esta prueba, no solamente se midió la distancia máxima que se pudo recorrer con una sola carga, sino también el consumo y la desviación de la