Cansados de los problemas que ocasionan los filtros de partículas FAP, especialmente en los motores diésel, o debido a lo caro que resulta cambiar un filtro cuando se avería -en torno a 2.000 euros, según el vehículo y el motor-, cada vez son más los usuarios que se plantean la posibilidad de recurrir a una limpieza del mismo por parte de un taller especializado, mientras que hay quienes, directamente, todavía optan por anularlo..
Lo primero que hay que decir en este sentido es que circular con un coche al que se le ha eliminado el filtro de partículas es ilegal, además de afectar de forma negativa al medio ambiente. También es importante saber que la mejor manera de evitar averías con el filtro de partículas, además de tomar una serie de medidas muy sencillas, es limpiarlo tú mismo… conduciendo. Aquí te explicamos cómo evitar averías en el filtro de partículas: 10 consejos para que el filtro de partículas de tu coche diésel dure más.
¿Para qué sirve el filtro de partículas?
Para entender mejor por qué se averían los filtros de partículas y los problemas y fallos que ocasionan, lo mejor es conocer cómo funcionan, aunque sea de pasada. Lo que hace el FAP es reducir un tipo concreto de emisiones: las partículas sólidas generadas durante la combustión. Hay filtros de partículas para motores de gasolina y para motores turbodiésel. Los que dan más problemas, por las características del combustible y de este tipo de motores, son los filtros de partículas diésel, que son los que generan más partículas durante la combustión.
Estos filtros, que se colocan en el sistema de escape, cuentan con una estructura de material cerámico en su interior formando una serie de canales en los que se quedan atrapadas las partículas nocivas que circulan en el flujo de los gases de escape a su paso por el filtro. Para eliminar estas partículas antes de que obstruyan el filtro normalmente se recurre al AdBlue, un aditivo que rebaja la temperatura a la que estas partículas se incineran, facilitando el proceso de regeneración pasiva del filtro. Los primeros filtros de partículas no necesitaban Adblue, pero ya prácticamente no quedan, solo se encuentran en los coches más antiguos.
Si esto no es suficiente, que normalmente no lo es -depende mucho de las condiciones de utilización del coche y del estilo de conducción-, el filtro puede requerir de una regeneración activa. Se trata de un proceso que se pone en marcha de forma automática cuando el sistema detecta que existe un determinado diferencial de presión entre la entrada y la salida de los gases de escape en el filtro, debido a la acumulación de estas partículas nocivas. Para que se produzca este proceso el sistema realiza inyecciones adicionales de combustible durante el funcionamiento del motor, que elevan la temperatura de los gases de escape y ayuda a limpiar el filtro de partículas.
¿Por qué se avería el filtro de partículas?
Como puedes imaginar, parar el motor cuando está realizando un proceso de regeneración activa, que puede durar unos cuantos minutos, no es nada bueno para el FAB. El problema es que no hay forma de saber si el filtro está regenerándose, pues no se enciende ningún testigo de aviso en la instrumentación.
En trayectos cortos o si se circula mucho por ciudad, además de generarse más partículas, es fácil que interrumpamos un proceso de regeneración… o incluso varios consecutivos, lo que hace que el filtro se colapse. Una posible solución en estos casos es acudir al taller y que realicen una regeneración forzada: se “obliga” al motor a iniciar un proceso de regeneración activa completo mediante la máquina de diagnosis.
El filtro también puede dejar de funcionar porque ha llegado al final de su vida útil. En este caso, los ciclos de regeneración ya no son posibles, sencillamente el filtro ha perdido su capacidad para “atrapar” las partículas y eliminarlas mediante estos procesos de regeneración.
¿Cómo saber que el filtro de partículas está obstruido y qué debo hacer?
Hay vehículos que cuentan con un testigo luminoso de avería específica del filtro de partículas, que se enciende en la instrumentación cuando existe un problema. En otros casos se enciende el mismo testigo de fallo motor que puede identificar otros problemas relacionados con los sistemas de inyección o descontaminación del motor, por ejemplo la EGR o el caudalímetro.
Un FAP obstruido o que no cumple su función puede provocar desde un aumento del consumo hasta pérdida de potencia, dificultad para que el motor suba de vueltas o incluso que se active el modo de funcionamiento de emergencia. Lo normal es que el veredicto final se realice en el taller, con los medios adecuados.
Una vez detectado que existe un problema con el filtro de partículas, básicamente existen dos soluciones: sustituirlo o intentar realizar una limpieza y/o reconstrucción del filtro averiado. Lo más efectivo es lo primero, pero también lo más caro: cambiar el filtro de partículas por uno nuevo puede costar entre 1.500 y 3.000 euros en función del vehículo, frente a los alrededor de 300 euros de una limpieza.
Por nuestra parte, no consideramos como una tercera solución la que eligen algunos usuarios, ya sea porque no es posible realizar una limpieza -el filtro ha llegado al final de su vida útil y lo que tocaría es sustituirlo- o, sencillamente, para olvidarse de posibles problemas de regeneraciones, de si se utiliza el coche en trayectos cortos o largos o de tener que reponer Adblue. Nos referimos a eliminar o anular el filtro de partículas, algo totalmente ilegal. Más adelante hablamos de ello.
Limpieza del filtro de partículas
Existen distintas formas de limpiar un filtro de partículas obstruido.
Aditivos que se añaden al combustible
Y aquí me gustaría empezar hablando de los aditivos que se añaden directamente en el depósito de combustible, como por ejemplo estos de Motul o de LIQUI MOLY . Normalmente estos aditivos no son para limpiar el filtro, sino para ayudar a que no se obstruya utilizándolos regularmente.
Es una solución asequible, en torno a 15 euros cada bote, que no requiere pasar por el taller, aunque su efectividad es más bien baja. Pueden funcionar en casos de obstrucción parcial del filtro; de hecho, hay reportes de usuarios a los que les ha ido bien. Eso sí, infórmate primero del tipo de producto y su compatibilidad. Los hay que no sirven para motores que ya tienen un sistema SCR con Adblue, mientras que otros sirven para todo tipo de motores. ¿Tienen riesgo? Sí: aunque es poco probable, existe la posibilidad de dañar la estructura cerámica interior del filtro, debido a la agresividad química del aditivo.
Limpieza profesional del FAP en el taller
Existen distintos métodos. Uno de ellos es mediante la pulverización con pistola de alta presión (hidrolimpiadora) de un producto específico que elimina la suciedad incrustada en el filtro, más el posterior proceso de enjuagado. Para ello puede no ser necesario desmontar el filtro, pero es peligroso: si está situado muy cerca del motor, puede entrar líquido a la cámara de combustión, por ejemplo a través de una válvula de escape abierta. Es un proceso relativamente efectivo.
Otro sistema algo más eficaz, y muy popular en la actualidad, es la limpieza del filtro de partículas mediante ultrasonidos. Con este proceso se desprende la suciedad adherida a las paredes del componente cerámico del filtro aplicando ultrasonidos. Las máquinas ultrasónicas de nueva generación diseñadas funcionan sumergiendo el filtro en una cubeta que contiene líquido limpiador, aplicando posteriormente los ultrasonidos con una frecuencia adecuada para que la suciedad se ablande y se suelte.
Sin embargo, los mejores resultados se consiguen con máquinas o cabinas especiales de limpieza del FAP. Estas máquinas inyectan agua y un aditivo detergente especial, con la ventaja de que realizan un flujo en ambos sentidos, garantizando una limpieza eficaz y, muy importante, un completo secado tras el proceso.
Los precios de la limpieza de un filtro de partículas en el taller pueden oscilar entre los 200 y los 400 euros.
Anular el filtro de partículas
Y volvemos a la cuestión más delicada, la anulación o eliminación del filtro de partículas. Repetimos, que quede claro, una práctica totalmente ilegal, que afortunadamente ya no es tan popular, pero a la que todavía muchos usuarios recurren cuando la opción de limpiar o reparar no es posible, o no pueden afrontar la compra e instalación de un filtro nuevo. ¿Qué cuánto cuesta anular un filtro de particulas? Pues no creas que es barato… en función del vehículo el precio puede oscilar entre los 200 y los 1.000 euros.
Circular con un vehículo al que se le ha anulado o eliminado el filtro de partículas es totalmente ilegal
Ojo porque aquí hay mucho desconocimiento. No solo en cuanto a los aspectos legales, también existe la falsa creencia de que basta con cortar, eliminar y soldar. Pero anular el filtro de partículas no es nada fácil. No solo requiere el vaciado del elemento cerámico interior o la sustitución completa del filtro por un tramo de escape, sino también realizar una reprogramación del software. Primero se anulan electrónicamente las funciones del filtro vía ECU, para posteriormente realizar la anulación física, que consiste en el vaciado del filtro.
También es frecuente pensar que si se elimina el filtro de partículas, no se va a detectar en la ITV. Es cierto que la prueba de gases a la que se someten los vehículos con motor turbodiésel se realiza con un opacímetro, que analiza los gases de escape y es capaz de determinar de forma precisa las emisiones, pero no detecta si se ha eliminado el filtro. Sin embargo, los inspectores de las ITV cada vez cuentan con más herramientas para detectar este fraude. Una simple inspección visual puede revelar que el filtro ha sido manipulado, y también pueden utilizarse herramientas de diagnóstico OBD, que se conectan al vehículo para detectar irregularidades.
Otro error es pensar que si un taller te elimina el filtro de partículas, podrás reclamar en caso de tener algún problema. Lo normal es que si encuentras un taller que realice esta operación, tengas que firmar un documento de exención de responsabilidad.
Los problemas de anular o eliminar el filtro de partículas
De las ventajas de eliminar el filtro de partículas ya hemos hablado. Y también, no nos cansaremos de decirlo, que es ilegal hacerlo. Pero también hay que saber que eliminar un filtro de partículas puede ocasionar muchos problemas. Estos son algunos de ellos:
- Fallos en el motor. No es sencillo realizar la anulación de un filtro de partículas y la correspondiente reprogramación del software sin riesgo de sufrir problemas en el futuro por un mal funcionamiento que puede causar otras averías posteriores. Ojo, que aquí hablamos no solo del turbo, también de los catalizadores o el propio motor.
- ITV desfavorable. Lógicamente, si se detecta en la ITV que el vehículo tiene el filtro anulado o eliminado, para poder conseguir la ITV favorable habrá que presentar de nuevo el coche a la inspección con un filtro correctamente instalado.
- Pérdida de garantía. Cualquier manipulación sobre el filtro de partículas o el software del coche es motivo directo para perder la garantía del mismo, en caso de estar todavía vigente.